Deterioro de la calidad de vida
María del C. Sposito DNI 10.559.467
Neuquén
Estamos muy cerca de las elecciones de nuestros representantes a nivel provincial y municipal. Por lo tanto considero oportuno realizar algunas reflexiones sobre el ejercicio de la autoridad en la ciudad de Neuquén ya que vivo en la calle Cheuquén del barrio Bouquet Roldán. En efecto, sobre esta arteria se han habilitado un corralón que pertenecería a “Ámbar” y un service a cielo abierto propiedad de la firma “Siglo XXI”.
En el primer caso los vecinos de la cuadra elevamos un petitorio a la Dirección de Comercio, puesto que se produce la circulación de camiones de enorme porte que a veces llegan de madrugada causando una gran contaminación sonora y del aire, alterando horarios de reposo, perjudicando el pavimento y obstaculizando el tránsito. Recibimos por toda respuesta que como era una arteria caracterizada como mixta, con actividades comerciales y viviendas, debían convivir empresas y vecinos.
En el segundo caso, la empresa siglo XXI, posee locales de en Planas 1445 donde vende tractores cortacésped, desmalezadoras y fumigadoras, motosierras y otra gran variedad de motores, cuya reparación se realiza en el service a cielo abierto localizado en lo que eran dos casas de familias sobre la calle Cheuquén.
Las consecuencias de probar y hacer circular las máquinas desde y hasta los vehículos que las llevan y traen incesantemente son ruidos ensordecedores, olor penetrante a combustible que empeoran afecciones respiratorias, alteraciones del horario de descanso, obstrucción de la entrada de autos e imposibilidad de escuchar radio, televisión etc, impidiendo cualquier tipo de actividades intelectuales de 8 a 18,30.
Las denuncias realizadas ante la autoridad municipal con respecto a esta última firma tampoco han tenido respuesta adecuada, por lo que la mentada “convivencia” consiste en el triunfo del más fuerte sobre el más débil al cual el gobierno debería proteger y hasta podría decirse que son las empresas las que ejercen la autoridad en esta calle.
Por lo tanto debemos tener en cuenta a la hora de votar que más que discursos grandilocuentes, obras faraónicas, grandiosos festivales y lujosas torres necesitamos que se cuide una calidad de vida de los vecinos que estamos perdiendo a pasos agigantados.
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