Cipolletti: aceptó una condena por dejar morir a su beba

JUDICIALES

Una mujer acusada de dar a luz y dejar morir a su bebé en el baño de un micro aceptó su responsabilidad en un juicio abreviado y hoy se conocerá si el tribunal homologa el acuerdo por 6 años y 8 meses de prisión efectiva. Viajaba desde Córdoba hacia Neuquén y los operarios de la empresa Flechabus encontraron al bebé en el depósito del baño químico. Lo había tirado por el inodoro.

La semana pasada la Cámara Segunda, a propuesta de las partes, hizo el juicio abreviado y la imputada, cuya su identidad no se difundió, fue asistida por el abogado particular Gerardo Tejeda. El fiscal de Cámara fue Ricardo Maggi.

La mujer tiene 29 años y llegó a juicio acusada por el delito de “abandono de persona seguido de muerte agravado por el vínculo”. La pena mínima para esa figura es de 6 años y 8 meses de prisión, justamente lo que acordaron las partes. La acusada reconoció su culpabilidad aunque manifestó que siente mucho dolor por lo ocurrido y que no puede explicar lo que pasó. Ella es profesional, tiene trabajo, está en pareja y es madre de otras dos hijas menores.

Dice la requisitoria de elevación a juicio que “en fecha 31 de julio de 2010 a las 5 de la madrugada se produjo por parte del personal de la terminal de ómnibus de Cipolletti el hallazgo, en el receptáculo contenedor de líquidos del baño químico del ómnibus de la empresa Flechabus, del cadáver de un bebé, sexo femenino, de 9 meses de gestación aproximada, de 3.500 kilos de peso, de 52.2 centímetros de largo, el que fuera dado a luz momentos previos por parte de la incusa, la cual luego de ello se retiró hasta el asiento asignado en el colectivo en el que viajaba desde la provincia de Córdoba con destino a Neuquén, sin prestar ayuda ni dar aviso de lo sucedido, poniendo así en peligro la vida de la bebé que nació viva, abandonándola a su suerte y colocándola en una situación de desamparo pese a la posición de garante que tenía, quien resultaba incapaz de valerse por sí misma y quedó oculta en la parte inferior del inodoro, que se hallaba lleno de líquidos químicos, agua, orina y heces, lo que le produjo la muerte”.