Comenzó el juicio a Anzaldo y hubo incidentes fuera del juzgado

La denunciante del ginecólogo de Cinco Saltos ratificó sus dichos, dijo su abogada. Para el defensor Oscar Pandolfi, "quedó claro que la chica miente".

CIPOLLETTI (AC).- No se tapó el rostro como suelen hacer otras víctimas de casos similares para entrar a Tribunales. Tampoco se presentó más temprano como lo hizo el imputado. Ingresó intentando demostrar valentía, aunque estalló en lágrimas más de una vez.

La primera joven que denunció a Carlos Anzaldo por abuso sexual ayer se animó a estar frente a su ex profesor y ginecólogo y contar lo sucedido. «Ratificó sus dichos. Estamos muy satisfechos con lo que declaró», dijo Rina Barbieri, la abogada de Poder Ciudadano que, junto a Romina Sckmuchk, la representa en el debate.

Pero la defensa opinó todo lo contrario. «Quedó claro que la chica miente», aseguró tajante Oscar Pandolfi, uno de los abogados del ginecólogo. «Sus dichos eran todo lo volátil que nosotros esperábamos que fueran», agregó.

La primera audiencia fue extensa. Y tensa. Es que fuera del edificio de la Justicia Penal en Cipolletti se dispuso un exagerado operativo policial que lo único que hizo fue provocar más a los referentes de distintas organizaciones que apoyaban a la víctima. Hubo insultos, forcejos, gritos y hasta agresiones.

Anzaldo no se topó con toda esta situación porque llegó muchísimo antes. A las 7.05, con dos horas de anticipación, ya estaba dentro de las instalaciones junto a su familia esperando el inicio del juicio, que se hizo a puertas cerradas.

Como se preveía, la defensa planteó varias cuestiones preliminares que demoraron las testimoniales. Apenas se abrió el debate, Pandolfi y Gustavo Palmieri se opusieron a que declararan como testigos las jóvenes que aseguran haber sido víctimas de abusos cometidos por Anzaldo. Dicen, en forma irónica, que se trata del mismo «modus relatandi» y que nada tienen que ver con el hecho que se juzga ahora. Pero la Cámara no les hizo lugar. Tampoco a que ingresara la familia del médico a la sala de audiencias, a la que no puede asistir el público porque la víctima era menor de edad cuando ocurrió el caso.

Recién cerca del mediodía empezó a declarar la joven que ahora tiene 18 años. Según sus abogadas, si bien se quebró durante su relato «porque este es un hecho muy movilizante para ella» ratificó «todo».

La única diferencia en su testimonio fue que hizo una «aclaración», dijeron, respecto del día en que habría ocurrido el abuso. «Lo que hizo fue ubicarlo temporalmente entre qué fecha y qué fecha podría haber pasado, pero no aseguró que pasó un día determinado», como lo hizo en la instrucción. En su denuncia inicial aseguró que fue el 16 de febrero de 2006. Ahora lo ubicó «entre el 16 y antes del 24» de febrero. Este era uno de los puntos que atacaba con varios argumentos la defensa, que también tomó como un indicio de que «miente» que ayer «agregó una tercera visita al consultorio».

«Era la única manera de hacer coincidir más o menos sus dichos con la prueba documental que hay en la causa. Y esto es inverosímil porque el día que está documentado, precisamente es el 16, como siempre dijo ella. Después se tuvo que retractar porque el 16 hay testigos que la vieron salir del consultorio de Anzaldo, junto a su madre

y dándole un beso a Anzaldo. Hoy reconoció que mintió dos veces», destacó Pandolfi.

Según la querella, la chica ratificó lo fundamental: que el abuso ocurrió en el consultorio del médico, que a su vez era su profesor de Biología. Reiteró que Anzaldo le hizo creer que estaba embarazada y que debía colocarle una pastilla en la vagina para hacerla menstruar. Que le pidió que se desvistiera y que luego comenzó el ultraje. Hubo acceso carnal (por vía oral y vaginal).

Durante la mañana también le dieron la posibilidad a Anzaldo para que declarara pero se abstuvo. Sus abogados no descartan que lo haga en otro momento.

Debido a las dilaciones por las cuestiones preliminares, los testigos agendados para la mañana pasaron para otro día. En la tarde sólo se escucharon tres de los catorce previstos para la jornada. Estuvo la amiga a quien la víctima le contó el hecho, una joven que no vive en la zona que dijo haber sido víctima de un abuso sexual cometido por Anzaldo (sin acceso carnal) y una paciente del médico.

Quedaron pendientes los papás, quienes igual estuvieron toda la jornada acompañando a su hija fuera de la sala.

Esta es la primera causa que se inició en contra de Anzaldo.

El debate se retomará el 24.


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