David Byrne, el músico atento

Pero en esta entrevista explica cómo fue que descubrió el tropicalismo brasileño.

El músico David Byrne, referencia ineludible en la sonoridad del rock y planetas orbitantes de las últimas décadas, se encuentra en San Sebastián, donde participa como uno de los jurados de la Competencia Oficial de la 61ª edición del Festival de Cine. Líder de la revolucionaria Talking Heads, artífice del sello Luaka Bop que editó y dio visibilidad en todo el mundo a decenas de músicos de América Latina, África y Asia, Byrne llegó a San Sebastián en medio de una gira europea en la que se está presentando junto a la cantante pop St Vincent. El músico, que escribió y filmó la película “True Stories” en 1986 y estuvo en San Sebastián en 2000, cuando ofreció un increíble concierto junto a Caetano Veloso, se tomó unos minutos en su tarea como jurado para charlar con Télam, en una conversación distendida en el hotel María Cristina. Hablando sobre la música de América Latina, Byrne cuenta que lo primero que conoció fue a Celia Cruz, Tito Puente y los músicos del Caribe, que tocaban habitualmente en clubs de Nueva York, adonde se mudó a principios de los 70, después de haber nacido en Escocia y vivido desde los dos años en distintas ciudades de Estados Unidos. “El encuentro con esos músicos fue grandioso porque podía escuchar grandes canciones con ritmos tremendos y también un tipo de melancolía, una cierta tristeza en las letras y las melodías que venían juntas con un poder vital que se desprendía de sus músicas donde lograban balancear la tristeza, que iba para abajo con ese tremendo poder que la llevaba para arriba; y creo que de eso se trata, en definitiva, la vida”, cuenta . Años después, Byrne da con los grandes músicos del tropicalismo brasileño, Tom Ze, Caetano Veloso, Gilberto Gil, a los que desconocía completamente y de los que no tenía mínima referencia, “no había Internet”, dice. “Yo estaba editando ‘True Stories’ y una mañana libre que tuve fui a una tienda y compré discos de Caetano, Gil, toda la gente de la Música Popular Brasileña (MPB). Fue sólo escucharlos y pensar, esto es increíble”, señala. Byrne evoca que “cuando me topé con la música de Tom Ze llamé a mi amigo Arto Lindsay, que había crecido en Pernambuco pero era parte de toda la escena ‘avant garde de la música neoyorquina y le pregunté: ‘¿quién es este tipo, suena como si fuera de Nueva York?’”. “Estos músicos brasileños –relata– me permitieron llegar a un descubrimiento central para mí: que puedes hacer música radical y que sea bonita, y que en el Norte está escindido: de un lado va la música agradable de escuchar, bonita, y de otro la música de riesgo. Pero ellos lograron combinar de un modo estupendo lo ‘avant garde’ con una música muy agradable, la ecuación perfecta”. Líder de los Talking Heads, que entre 1975 y 1988 introdujeron nuevos sonidos en la ingeniería planetaria del rock, con una carrera solista increíble que arranca con colaboraciones con Brian Eno (“My Life in the Bush of Ghosts”, de 1981), y tiene en 1989 el exquisito “Rei momo”, donde trabaja con ritmos como el merengue, el son, el samba brasileño, el chachachá, cuenta que años después de estos primeros descubrimientos empezó a escuchar todas las bandas contemporáneas de Latinoamérica. “Lo que más me interesó es que las bandas no copiaban el modelo de las bandas del Norte (si bien algunas lo hacen) ellos estaban inventando un nuevo tipo de música que incluía algo de la música con la que habían crecido, algo de la música de sus padres, la música de la calle y también la música de la escena internacional, con influencias de Estados Unidos y Europa y todo eso combinado”, evalúa. “Eso es lo que me parece grandioso, que allí la música funciona como una herramienta para descubrir quién sos como cultura y quién sos como persona”, redondea. En cuanto a su rol como jurado de la Competencia del festival, Byrne avisa: “busco algo que me sorprenda, alguien que tenga una mirada cinematográfica nueva”. “También busco –abunda– alguien que quizás no esté reinventando el cine pero sí que nos cuente una historia que no escuchamos antes y también me gusta indagar el trabajo de grandes directores que hicieron muchos filmes y que traen lo nuevo de su producción al festival”. (Télam)

En Latinoamérica , dice Byrne, “la música funciona como una herramienta para descubrir quién sos como cultura y como persona”.

Pedro Fernández Mouján


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