Deportivo Roca y la revolución de los centennials

Se considera “centennials” a aquellos jóvenes nacidos a fines de la década del ‘90 hasta la actualidad y es, junto a los “millennials”, considerada la generación del futuro ya que se presume que para el 2030 formarán la mayoría demográfica del mundo.

Pero en el torneo Apertura de la Liga Confluencia el futuro llegó hace rato y se instaló en el Deportivo Roca.

El Naranja es uno de los semifinalistas que tiene el certamen. Los dirigidos por Diego Napolitano se destacan no sólo por su buen trato de pelota, su capacidad goleadora y solidez defensiva, sino también porque su promedio de edad es de apenas 19,3 años.

Con un equipo plagado de juveniles, muchos de ellos debutando en Primera, Roca pateó el tablero. Producto de un trabajo en inferiores de años, que inició con Leonardo Serrano como DT, el Depo se convirtió en uno de esos equipos a los cuales hoy nadie quiere enfrentar.

Así, el Naranja rompió con uno de los viejos axiomas que se escuchan en las distintas canchas de la región: “para ser protagonista en la Confluencia hay que tener un equipo con experiencia”.

De la mano de su joven entrenador (35 años) y al igual que sucede en la vida cotidiana los chicos llegaron para marcar el rumbo.

Siete de los once habituales titulares tienen menos de 20 años. Enzo Riffo (23), arquero; Facundo Miguel (25), central; Sebastián Olmos (21), mediocampista ; y Carin Najul (21), volante ofensivo, son más grandes del equipo. Todos ellos llevan en Primera como mínimo tres temporadas y a pesar de su corta edad son los referentes.

Con la desfachatez típica de la juventud Roca se le plantó a equipos experimentados, a la mayoría los superó y ahora sueña con el título.

En el partido de ida de las semifinales, en Allen ante Unión, los de Napolitano cayeron 1-0 y ahora están obligados a ganar el próximo domingo para estar en la final.

Los pibes deberán rendir otra prueba de carácter ante un conjunto sólido y con jugadores de experiencia. Más allá del resultado que pueda conseguir, este plantel llegó a la Confluencia para aportarle frescura y un estilo propio bien marcado.

Todavía sin novedades sobre lo que pasara con el Naranja en las competiciones federales, en el club seguramente están tranquilos porque el futuro parece estar asegurado.