Un lugar para disfrutar

Diseñada para vivir el afuera, esta vivienda es acompañada en todo el sector social por una larga piscina y un verde jardín. Así se aprovecharon las mejores vistas en un terreno que presentaba presiones visuales por su forma. El estudio Mancini arqs, de los arquitectos Andrea, Marcelo y María Paula Mancini fue el encargado del proyecto de esta vivienda de 300 mts2. “El predio se encuentra ubicado en el ingreso de un barrio cerrado que se organiza sobre ambas manos de una calle única donde se vuelcan cinco viviendas por lado -explican los arquitectos-. Limita entonces con dos calles exteriores que convergen en la esquina noreste y una de acceso desde el barrio, que se enfrenta a la orientación sur”. La coincidencia de la buena orientación y excelentes visuales que ofrece el lote sobre la calle exterior hacia el este permitió al estudio implantar la vivienda con un claro sentido longitudinal en el eje sur-norte, dejando el retiro obligatorio que separa del vecino como fuelle, hacia donde se dispusieron las áreas de servicio del programa. La organización funcional se simplificó entonces, a la sucesión de espacios principales a través de un esquema circulatorio lineal, que se invierte en la planta alta, para que así todos los ambientes principales tengan contacto directo con el espacio exterior propuesto, como así también las mejores visuales del entorno y una excelente orientación. El paisajismo refuerza la idea, ya que se propone una piscina que acompañe todo el desarrollo de la vivienda, generando un clima de interacción directa y límites difusos entre el interior y el exterior, gracias a la carpintería integral diseñada sobre todo el lateral. La propuesta espacial, también surge de la idea rectora, donde el ámbito creado para albergar la escalera y el puente de vinculación de ambos sectores de dormitorios, reafirman la búsqueda de la relación con el exterior. Desde lo formal se optó por un diseño de líneas puras. El revoque liso, el aventanamiento corrido sobre el este y el ritmo de las columnas, se enmarcan con el detalle de la piedra en la fachada y en la parrilla, creando un criterio formal de opacidad hacia el sur y oeste y una clara apertura sobre el este y el norte. La composición de la fachada, reafirma el sentido general de la propuesta y el delicado alero de hormigón, a modo de bienvenida marca el inicio del sistema circulatorio por el cual podremos recorrer toda la vivienda. Más info: www.manciniarqs.com.ar