El Bolsón: a partir de una tragedia familiar, acompaña a familiares de víctimas de violencia

Justicia Comarca es la asociación que trata de dar contención a los que deben peregrinar a los Tribunales de Bariloche para tratar de que se haga justicia en casos criminales. La historia de Luis, su fundador.

En el transcurso de las recientes tres audiencias judiciales que se llevaron a cabo contra un gendarme imputado por un caso de abuso sexual infantil en El Bolsón en 2019, un grupo reducido de unas diez personas aguardaba afuera del edificio de Tribunales de Bariloche, con carteles en los que se leía: “Exigimos justicia”.

Viajaron desde El Bolsón para acompañar y contener a los padres de la víctima. Soportaron frío y viento por horas afuera del edificio ya que, según contaron, no los dejaron ingresar a ninguna sala “bajo techo” para esperar la finalización de la audiencia.

Justicia Comarca es una asociación civil conformada por familiares de víctimas de hechos de violencia que nació cuatro años atrás.

Luis Albornoz fue su impulsor. “El 13 de febrero del 2016 me matan a mi único hijo, Matías. Es una situación en la cual la vida te parte en dos”, resume este licenciado en Enfermería que trabaja en el área de Cuidados Paliativos del hospital de El Bolsón.

Matías tenía 29 años y era remisero. Lo mataron en el Paralelo 42. “Para llevarse la recaudación, le pegaron un tiro. Como ya habían intentado robarle, se resistió, forcejearon porque él intentó sacarles el arma que se disparó y le pegó en el corazón”, describe con una tristeza que impregna el relato. “El caso –añade– lo pudimos resolver en un año y medio. Las dos personas que lo asesinaron están presas y condenadas”.

El dolor por la muerte de Matías caló profundo en El Bolsón y Luis, conocido y querido en el pueblo por el trabajo que lleva a cabo, reconoce que sintió apoyo y contención en todo momento. “Y de repente, aparecieron las Madres del Dolor. Ahí empezás a dimensionar la importancia de las organizaciones. La presidenta de las Madres del Dolor era una perfecta desconocida para mí y se puso a disposición. Nos acompañó a las audiencias. Comprendí importancia de la contención”, advierte.

Cuando terminó el juicio por el asesinato de su hijo, Luis sentía que no podía salir a la calle y que ya no podría salir adelante. Recibió asistencia psicológica y psiquiátrica durante varios meses.

En la Justicia falta empatía, ponerse en el lugar del otro. Hay muy poca gente así dentro de la Justicia”.

Luis Albornoz, Justicia Comarca.

“De golpe, empezó a venir gente que había perdido a sus familiares y me preguntaban: ‘Don Luis, ¿cómo hizo, usted?’ Hasta que en mi casa me dijeron que parara, que era un ámbito privado. Y ahí, propuse empezar a juntarnos en otro lugar cada 15 días. Hoy somos más o menos 10 o 15 familias”, expresa este hombre de 60 años.

Desde entonces, si alguien plantea que tiene una audiencia judicial en Bariloche a la semana siguiente y no tiene dinero, el grupo organiza ventas de empanadas o pide vales de combustible al municipio de El Bolsón para trasladarse en el auto de Luis.

“En casos como éstos, la orfandad que sentís es indescriptible. Solo aquel que lo vive, sabe la cantidad de viajes que tenés que hacer a Esquel o a Bariloche. Además, la Justicia nunca te informa que podés tener un querellante gratuito. El familiar viene destruido y en ese momento, nosotros contenemos”, señala Luis y agrega: “Cuando llegás a la Justicia, te hablan en un idioma que no entendés, de escritos y artículos, y vos te preguntás: ¿y esto con qué se come? Para los abogados es simplemente un trabajo”.

Desde “Justicia Comarca” aclaran que la finalidad del grupo no es hacerse cargo de las causas judiciales. “Si alguien tuvo un problema, lo vamos a acompañar. Generalmente nos ocupamos de casos como asesinatos. En este caso reciente de abuso sexual infantil, lo que hicimos fue abrirles las puertas a los padres y acompañarlos en el proceso judicial”, explica Luis y admite con tristeza que cada vez notan más y más casos de violencia.

Este hombre no baja los brazos. “Esta lucha también tiene que ver con lo que soy: un profesional de la ayuda y del cuidado. Pero el dolor de perder a un ser querido es algo intransferible. Solo uno sabe lo que se siente. Cuando surgen estos casos, siento la memoria de Mati y me repito que su muerte no fue en vano”, dice.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios