El calvario de Nelly, de 82 años, por acceder a un tratamiento médico

“Es tristísimo tener que pelear contra una enfermedad y contra una prepaga que no cubre lo que debería cubrir. Lo que queremos es que mi mamá esté lo mejor posible y lograrlo es desgastante”. Con angustia, Liliana Cabrera describió la larga lucha que vive junto a sus hijos, desde hace un año, para garantizar el tratamiento de su madre.

Nelly García, de 82 años, es la dueña de Casa Raúl, la tradicional librería de la calle Mitre, pero en el último tiempo, ya no puede trabajar en el negocio.

Cinco años atrás, le detectaron un mieloma múltiple (un tipo de cáncer de sangre) y ahí comenzó la lucha con la prepaga para la cobertura de los remedios oncológicos. Con ese diagnóstico, se le aceleró un cuadro de demencia severa.

“Tiene momentos de lucidez pero se pierde. Lo cierto es que no puede valerse por sí misma y no es consciente de la realidad”, relató Cabrera.

En un intento por levantarse, la mujer se cayó y se quebró la cadera en los últimos meses. Desde entonces, solo puede trasladarse en silla de ruedas.

“Un dictamen médico le determinó discapacidad al 100% con la necesidad de un acompañamiento las 24 horas. Pero ha sido una constante lucha para garantizarlo. Además, Galeno realiza los reintegros fuera de fecha, se retrasa en el depósito del salario de las acompañantes (más de un mes) y se niega a cubrir ciertos rubros”, cuestionó Cabrera y, agregó: “Además, cuando no llegamos a pagar la cuota de la prepaga en término, ya que tenemos que afrontar los gastos que deberían ser cubiertos de antemano por Galeno, nos cobran intereses por el retraso”.

En enero, la familia de Nelly presentó el primer amparo que resultó favorable. “El juez ordenó a Galeno a cumplir con todas las prestaciones pero no cumple. No damos más. Es mucha plata la que tenemos que poner y sentís mucha impotencia de saber que reclamás lo que te corresponde», objetó Cabrera.