El clima electoral en Bariloche lo marcan los gremios y la CEB

La campaña por la diputación no mueve las entrañas de la ciudad más poblada de Río Negro. Sin embargo, hay fuerte movilización en dos grandes sindicatos y una entidad con peso propio que tienen en marcha sus procesos internos.

El clima electoral se siente en Bariloche, pero no para la principal contiende nacional de este año que es la renovación de dos bancas de diputados en el Congreso. La movilización militante y la puja política está por estas horas en el seno de dos sindicatos con amplia representatividad y la Cooperativa de Electricidad Bariloche que tienen lanzados sus procesos electorales.

Los movimientos internos se activaron en septiembre cuando el gobierno Nacional terminó con la restricción de realizar comicios en organizaciones gremiales, sociales y otro tipo de entidades que habían quedado inhabilitados por la pandemia.

La CEB fue una de las primeras en motorizar la elección para renovar un tercio de sus consejeros y la totalidad de los delegados, ya que el año pasado no pudo cumplir con ese proceso electoral. Llegar a una banca de la cooperativa es anhelo de muchos que quieren ingresar en la vida política de la ciudad, por eso empresarios, dirigentes gremiales y sociales, vecinalistas y militantes políticos forman las listas sin reparos de ideologías.

Las elecciones de la CEB serán el próximo sábado 6 de noviembre, previo a las nacionales, y tiene unos 47.000 asociados habilitados para votar, aunque históricamente el nivel de participación no llega a los dos dígitos. Encabezan las listas Pamela Najul por el oficialismo (Blanca y Verde), Alejandro Pozas (Roja, que condujo la CEB durante 16 años) y Luis Barrales (Blanca y Celeste) como un desprendimiento de la conducción actual.


Cuatro listas en Soyem


La interna del gremio de los trabajadores municipales Soyem también genera ruido con denuncias cruzadas y polémica. Este comicio será el 19 de noviembre, cinco días después de las nacionales, y tiene un padrón cercano a los 2.000 electores.

El oficialismo con su tradicional color Blanco, lleva a Ernesto Losert para continuar al frente de la conducción. La cercanía con el gobierno de Gustavo Gennuso, que la semana pasada impulsó el debate del nuevo escalafón municipal y la posible ayuda para un bono de 5.000 pesos que distribuirá desde el hoy gremio, focalizan las críticas de los opositores.

Disputan uno de los mayores gremios estatales de la ciudad, la lista Verde con la candidatura de Brenda Morales; la Violeta que encabeza Miguel Guajardo; y la Negra con Idalinda Toro.


Uthgra repite la puja


La tercera contienda electoral que genera movilización interna son las elecciones del gremio de los gastronómicos Uthgra que serán el 2 de diciembre, con unos 5.000 afiliados en el padrón.

Nelson Rasini vuelve a liderar la lista Blanca con el respaldo de Ovidio Zúñiga que por su condición de jubilado no puede estar en la lista, pero integra el equipo de trabajo. Enfrente estará Rosa Negrón (Celeste), quien fue secretaria general durante 8 años cuando era parte del oficialismo, y ahora intenta por segunda vez recuperar el gremio.

Rasini y Negrón ya se enfrentaron en la elección anterior, en 2017, cuando el primero -discípulo de Zúñiga, que por entonces se encontraba detenido por la causa Arbos- sorprendió duplicando la cantidad de votos de quien entonces era secretaria general.


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