El FMI pide “un fuerte compromiso de toda la sociedad” con el ajuste

Un día después del anuncio del gobierno nacional, el Fondo Monetario Internacional respaldó ayer el acuerdo alcanzado con Argentina y consideró a las metas fiscales, de inflación y crecimiento establecidas como “factibles y realistas”, pero advirtió que el camino de ajuste para alcanzarlas será un camino duro: “Requerirán de un fuerte compromiso político y de toda la sociedad argentina”, dijo el jefe de la misión del FMI en Argentina Roberto Cardarelli.

Cardinelli –el hombre del Fondo en el país– dio una conferencia de prensa en Washington junto al economista jefe para América Latina del FMI, Alejandro Werner. El jueves se conoció que el organismo y las autoridades argentinas acordaron un préstamo “stand-by” excepcional de 36 meses de plazo por 50.000 millones de dólares. El gobierno tendrá que acelerar, a cambio, el ajuste fiscal: la meta fijada de déficit es de 1,3% para el 2019 (deberá haber equilibrio en 2020), con una inflación del 17% y un crecimiento entre 1,5 y 2%.

“Cuando se comienza con un 30% de pobreza, es imposible considerar un programa sin tenerla en cuenta. Ningún programa, plan de estabilización económica se puede concebir ignorando la situación social”, sostuvo sin embargo Cardinelli.

En ese marco, Werner aseguró que “el FMI ha venido trabajando con aquellos países que tienen programas para entender mejor las implicaciones sociales económicas y políticas de esos programas para que sean sostenibles en el mediano plazo”. En el caso de la Argentina, aclaró, se trata de “un programa que acelera la consolidación fiscal utilizando los instrumentos que las autoridades creen que son los más adecuados” para evitar los impactos sociales y de vida de los segmentos más vulnerables.

No obstante, Werner indicó que en algunos casos, “sí, obviamente, los gobiernos tienen que tomar decisiones difíciles para ver que segmentos del presupuesto proteger. Pero creemos en el objetivo de Macri de reducir la pobreza fuertemente”.

Respecto a los temores de caer en un nuevo 2001, el jefe para América Latina aseguró que el país “tiene una situación financiera sin vulnerabilidades, un tipo de cambio flotante y un programa fiscal y monetario congruentes”, mientras que “en 2001, la situación económica era de fuertes desequilibrios y había un régimen cambiario que tampoco le permitía ajustarse”.

El próximo paso para el acuerdo Stand-by tendrán lugar el 20 de junio cuando la Junta Ejecutiva del FMI se reúna en Washington para examinar el plan económico presentado por el gobierno de Mauricio Macri y decida su aprobación, como se prevé.

A partir de esa fecha, se espera el primer desembolso del acuerdo, que representará 30% de los 50.000 millones de dólares que prestará a la Argentina el FMI: unos 15.000 millones de dólares.

Cardarelli dijo que tiene previsto viajar a la Argentina en agosto próximo y confirmó que las revisiones del cumplimiento del plan que presente el gobierno se realizarán trimestralmente.

Macri con Lagarde, en la cumbre del G7

“Las medidas son factibles y realistas pero requieren un fuerte compromiso político y de toda la sociedad argentina”.

Roberto Cardarelli, jefe de la misión para Argentina del FMI