Metaverso: tecnología aplicada a la industria hidrocarburífera
El diseño, la construcción y la operación de las instalaciones podrían ser parte de un mundo de realidad virtual con interacción social. El metaverso industrial es un avance tecnológico incipiente que podría cambiar la forma de trabajar en el sector.
El metaverso permite que personas desde distintas partes del mundo puedan evaluar y conocer en tiempo real cómo funcionan las operaciones. Foto: gentileza Axel Entraigas.
La tecnología aplicada a la industria hidrocarburífera demostró ser una aliada en los procesos tanto de diseño, construcción y operación. En esta línea, el metaverso tiene un «gran potencial» tanto en términos de comunicación como de operación. En particular, el metaverso industrial va camino a cambiar la forma de trabajar en el sector.
El metaverso se define, de forma resumida, como realidad virtual con interacción social. Axel Entraigas, especialista en metaverso y Web 3 con foco en negocios y comercios en Accenture, explicó que nos encontramos en la etapa 3 de la Web, «en dónde empezamos a vivir el internet con experiencias inmersivas. Nos quedamos en estos entornos físicos y vivimos experiencias que son netamente del mundo digital».
«Estamos frente a una revolución tecnológica», indicó. Microsoft, socio de negocios con Accenture y Meta, define tres grandes bloques del metaverso. Por un lado, el del consumo «lo que conocemos hoy como la parte más de socialización, como el gaming«. Otra pata es la comercial, «dónde tenemos más el trabajo colaborativo la parte de recursos humanos de onboarding del personal y la experiencia inmersiva en la capacitación», señaló en diálogo con Energía On.
Este segundo bloque apunta al aprendizaje inmersivo, una herramienta que «para la industria y sector del petróleo es una ventaja tremenda. Te capacitás pero con riesgo cero», explicó. En el metaverso se puede replicar una planta nuclear, una torre de perforación, una plataforma offshore con iguales características de operación que una instalación real y las personas pueden operarla y cometer errores sin riesgos.
Así, «mejora muchísimo la atención y el aprendizaje de la persona y podés hacerlo de manera económica porque vos una vez que diseñas el mundo ya queda el modelo», remarcó. La firma Accenture es un ejemplo de este aprovechamiento a través de su proyecto Avatar, donde capacitaron a más de 150.000 personas y «con grandes resultados: el puntaje de la formación fue 4,7 sobre 5».
Por último, está el metaverso Industrial «en dónde conectan tecnología. Se pueden aplicar, por ejemplo, gemelos digitales para mejorar la operación de las organizaciones«. Dentro de metaverso el diseño y construcción se puede realizar con herramientas de Inteligencia artificial. Así se pueden llevar las ideas al metaverso «sin tener demasiada intermediación humana», marcó.
Por ejemplo, si la empresa cuenta con un equipo de torres de perforación, tiene sensores que miden por telemetría las variables en vivo. Con esa información se puede desarrollar un gemelo digital «que sea igual al de la vida real en donde yo pueda estar trayendo en vivo datos de esos equipos y se proyecta en realidad virtual», señaló.
Así, en cualquier parte del mundo es posible acceder a la información, interactuar con ella y hacer pruebas que según los resultados pueden ser aplicadas al mundo físico. A su vez, «puedo controlar variables en vivo». Por ejemplo, si surge alguna dificultad en la perforación, «puedo ingresar al metaverso y ver cómo están funcionando los equipos. A la vez puedo invitar a un mecánico, a un ingeniero que lo vea conmigo».
Este tipo de tecnologías permiten sortear barreras tales como el entendimiento de un idioma, ya que se puede traducir en simultáneo lo que se está diciendo. También dentro del metaverso es posible compartir varias pantallas y según el interés de los participantes de la reunión atenderán a la información que les sea más relevante, mejorando la experiencia de una videollamada donde sólo se puede compartir una.
Un caso que mencionó el especialista es el de la firma automotriz BMW, que desarrolló 32 plantas industriales con el metaverso. «En algunos casos las montan y en función de eso deciden. Así lograron 30% de eficiencia, que es un montón. Por ejemplo, metieron usuarios con los dispositivos dentro del metaverso y hacen el recorrido que tendrían que hacer» como si estuvieran trabajando, comentó.
Así definieron mapas de calor, «por dónde va a andar la gente. De esa forma buscaron de qué manera optimizar tiempos de desplazamiento, el tiempo de los ensambladores. Este tipo de tecnologías pueden ser llevadas a las distintas industrias«, subrayó.
Según indicó Entraigas, «un 71% de ejecutivos globales considera que el metaverso a tener un impacto positivo en su organización«. Por el momento, este tipo de tecnologías está en una etapa incipiente, donde » están empezando a desarrollarse e implementarse este tipo de tecnologías», indicó. Sin embargo, «tiene un potencial muy grande«.
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