Todo listo para la licitación de una obra eléctrica clave para la cordillera

Río Negro y Neuquén ya entregaron los pliegos para la licitación de Alipiba II. Con una inversión de 80 millones de dólares, la línea llegará a la zona de Bariloche y Villa La Angostura, permitirá dejar de lado la generación a gasoil y sumar nuevos desarrollos económicos hoy limitados.

Los gobiernos de Río Negro y Neuquén están expectantes ya que en cuestión de días se aguarda que desde el gobierno nacional se anuncie la licitación de la obra eléctrica Alipiba II, una línea clave para la zona cordillerana de ambas provincias que comenzó a impulsarse hace nada menos que una década.

“Ya entregamos los pliegos de licitación y estamos esperando que esta semana o la otra se pueda definir la fecha de licitación porque es una obra que va a hacer Nación directamente y que va a licitar Nación”, aseguró el diálogo con Energía On, la secretaria de Energía de Río Negro, Andrea Confini.

“Llevamos muchos años atrás de la obra”, contó y explicó que “es la segunda línea de abastecimiento a Bariloche, que hoy tiene una sola línea que va desde Alicurá hasta Bariloche y el día que cualquier cosa pasa en alguno de los tramos hacia Bariloche, la localidad se queda totalmente a oscuras”.

Pero además de esta garantía para el sistema eléctrico, son más los beneficios que Alipiba II traerá.
Hoy Bariloche tiene totalmente colapsada su capacidad de potencia y por eso el desarrollo de nuevos proyectos para Bariloche está limitado por la cantidad de energía que puede transmitir esa línea”, señaló Confini a la vez que recordó que la zona tiene también limitado el acceso de nuevo clientes a la red de gas de Camuzzi por las limitaciones en el gasoducto Cordillerano.

“Esta línea es definitiva y en verdad es muy importante para Bariloche y para Villa La Angostura. Es una línea que tiene como dos patitas, una va a Bariloche y la otra interconecta a Villa La Angostura”, indicó.


Menos contaminación


Y remarcó que en el lado neuquino, “hoy Villa La Angostura consume y genera a base de combustibles líquidos. Esa generación con combustible va a dejar de existir, van a dejar de contaminar, de emitir dióxido de carbono”.

En el caso de Bariloche, que cuenta con una reserva fría de 20 MVA, la nueva línea permitirá que esa reserva deje de estar en operaciones regularmente como ocurre hoy que ante cada pico de demanda debe encenderse y quemar combustibles, encareciendo además el costo del servicio eléctrico y las facturas de toda la zona.

La construcción de esta línea no es rápida. Según explicó Confini tomará entre 3 y 4 años porque además de la complejidad es una obra que estará afectada por las vedas del invierno que no habilitan a desarrollarla durante los 365 días del año.

“Es una obra que uno tiene que considerar que toma unos 3 años, con una inversión de 80 millones de dólares y que es un proyecto emblemático para las dos provincias”, destacó la funcionaria.


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