Escritores cuestionan a Gentili y el FER

ROCA.- “Frustrados e indignados”. Así se describe un grupo de escritores de Río Negro en una extensa carta enviada a los medios en la que cuestionan el accionar de la Subsecretaría de Cultura de la provincia en general y del Fondo Editorial Rionegrino (FER) en particular. La dura carta dirigida a los medios detalla los errores que se han cometido en las ediciones de los libros premiados por el FER, y varios inconvenientes ocurridos en la última Feria del Libro, sobre todo en la presentación de los textos, a la que calificaron de “mediocre”. Los escritores que firman el texto “exigen” a la Subsecretaría de Cultura “la reparación de los daños causados a nuestras obras recientemente publicadas, y el compromiso de cumplir con todos los requerimientos que hacen al buen desempeño editorial para las que fueron premiadas y esperan ser editadas en el transcurso de este año”. “Los escritores no vamos a aceptar que nuestras obras ganadoras por concurso público sean maltratadas de esta forma, ni que la Feria del Libro sirva solamente para el lucimiento personal de los funcionarios, en lugar de constituirse en un espacio de encuentro cultural y participación genuinos”, cuestionan. “Al no recibir una respuesta concreta de parte del Subsecretario de Cultura de la Provincia de Río Negro, Sr. Armando Gentili ni de quienes conforman el grupo editorial FER a las numerosas notas enviadas, en forma individual, tras la Feria del Libro, donde se presentaron las producciones 2010 de los escritores rionegrinos, nos hemos reunido para analizar pormenorizadamente el accionar de esa Subsecretaría que, lejos de conformarnos en algún aspecto, nos ha llenado de frustraciones e indignación a todos y cada uno de los escritores afectados”, comienza el texto que firman los escritores Norma Dus, Susana Amuchástegui, Carolina Biscayart, Sergio Petriw, Laura Calvo, Pedro Salomón, Jorge Carrasco, Carlos Mercapide, Claudio García y Silvia Sánchez. Entre los principales cuestionamientos, los escritores calificaron de “mediocre” la presentación de libros de autor y antologías que organizó el FER en la última Feria del Libro. Dice el texto: “Apenas tuvimos tiempo de vernos las caras con el resto de los escritores rionegrinos, mirar los libros editados, azorarnos por los errores más notorios e intercambiar algunas opiniones, nos trasladamos a la Sala Alfonsina Storni, donde se realizó la presentación de los libros del FER. (…) ¿Cómo es posible que siendo invitados, justamente, para la presentación de las Antologías de Cuento y Poesía, los escritores integrantes de las mismas fuimos absolutamente ignorados? ¿Para qué la provincia asumió los gastos de traslados y viáticos? ¿Para hacer número en la sala? ¿Para quedar bien? Pues lograron todo lo contrario”, dice el texto. Y agrega: “El discurso político del Sr. Gentili, donde se explayó sobre el maravilloso accionar de la Subsecretaría de Cultura y su participación en la próxima Feria del Libro de Frankfurt, no bastó para cubrir el bache “literario” que significó la ausencia de alguien del mundo académico que se refiriera a las Antologías de Cuento y Poesía, y a sus autores, la mayoría presentes en la Feria. Sólo los escritores premiados se autopresentaron y leyeron, a las corridas, unos textos. En esto consistió la presentación del FER. Una mediocridad, por donde se la mire”. El texto apunta también a Mónica Larrañaga, quien aparece como compiladora y coordinadora editorial de ambas Antologías”. La carta señala que ella “era la encargada de las presentaciones y se excusó por enfermedad. Obviamente, dada la falta de idoneidad e ignorancia en lo referente al campo de la literatura del resto del equipo editorial, nadie pudo decir una línea sobre las obras, ni referirse a sus autores ni pedirles que se acerquen al escenario, al menos, para presentárselos al público”. Con respecto a la Antología de Poesía, la carta sostiene que esos libros tenían “el lomo del libro montado sobre la portada y por ende vacío”; “las mismas palabras puestas con tilde y sin ella”. Y detalla: “En la primera página, donde deberían estar los integrantes del Jurado que intervino en el Concurso, figuran las autoridades del gobierno provincial -propaganda política-, no habiéndose escatimado espacios para colocar los logotipos de Cultura Río Negro, Fondo Editorial Rionegrino y el Escudo de la Provincia, en otros lugares del libro”. Los escritores también cuestionan la diagramación, “sin criterio ninguno: márgenes mínimos, “comido” el de la izquierda con el pegado del libro”, y hasta “biografías equivocadas que no corresponden al autor”, entre otros errores. Con la Antología de Cuentos ocurrió algo similar: “También en éstas se repiten los errores ya descriptos, sumados a los problemas de desprendimiento de las tapas, solapas que no dejan cerrar el libro, diseño de dudosa estética y cero creatividad, más apropiado de un catálogo de venta de manzanas de Río Negro que de obras literarias; textos “intervenidos” sin autorización de los autores; desconocimiento total de las convenciones de escritura literaria”. Por último, los escritores se preguntan “¿Cuál fue el trabajo de compilación de Mónica Larrañaga, y la coordinación editorial de esta señora junto con Silvio Castro? Sabemos que la elección de los cuentos para la Antología la realizó el propio Jurado (cuyos integrantes -reiteramos- ni siquiera figuran en los libros) y para la Antología de Poesía, fueron los mismos autores los que eligieron los poemas incluidos. Evidentemente, así como el FER los recibió, fueron agrupados sin criterio alguno. No hubo compilación de ningún tipo ni comentarios o análisis sobre las obras como llevan habitualmente las Antologías, tarea que debería haber realizado Mónica Larrañaga en su carácter de Compiladora”. Por fuera de estos errores, los escritores cuestionan también que los pasajes y viáticos para viajar a la Feria llegaron tardíamente y las entradas “en muchos casos no llegaron”.

Los escritores sostienen que la Feria del libro sirvió para “el lucimiento personal de los funcionarios” y apuntaron contra Gentili.