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La sofisticada cocina de Roberto Montiel, en Casa Blanca, Centenario

Hubo noche de maridaje y cocina fusión con selectos vinos de Susana Balbo, acompañados de exclusivos platos preparados por Roberto Montiel y Lautaro Barrionuevo, chef ejecutivo y chef del restaurante Casa Blanca.

Roberto Montiel protagonizando en «Casa Blanca» celebración del Día Internacional del Malbec

El chef Roberto Montiel sigue marcando diferencia desde su cocina en la gastronomía regional.

Por su alta calidad, precisión y creatividad su sello ya tiene una identidad inconfundible.

Muestra de esto lo dio en la última celebración del Día Internacional del Malbec, en su restaurante Casa Blanca, en Centenario.

En esa oportunidad, clientes e invitados disfrutaron de una noche de maridaje y cocina fusión, con los selectos vinos de Susana Balbo, acompañados de exclusivos platos preparados por Roberto Montiel y Lautaro Barrionuevo, chef ejecutivo y chef del resto.

A través de un exquisito menú, los anfitriones permitieron a los invitados experimentar impensadas notas de sabores, gracias a la certera combinación, de un menú de 4 tiempos, desde los entremeses hasta el postre, con un maridaje especial de los vinos y productos de cocina fusión.

De esa forma, fueron elevados a su máxima potencia, entremeses como ravioli de cangrejo fragancia de cítricos, queso mascarpone en sopa miso y alga wakame maridando con Críos Rose of Malbec.

También como parte de las entradas estuvo solomillo de ternera en piel de panceta, manteca de coral, risotto alla lombarda y Malbec sorpresa de granadas y crujiente de olivas negras, con el que acompañaron con el impresionante Malbec Benmarco Sin Límites Gualtallary.

La experiencia siguió con el plato fuerte que permitió a los comensales degustar un Rack de cordero en salsa bordelesa, chocolate amargo y perfume de balsámico, tierra de prosciutto y pistachos, caviar de malbec, malfattis de papa y zuchinni, maridado con Susana Balbo Signature Malbec.

Para cerrar la noche, los chef deleitaron los paladares de los presentes, con una delicia dulce, Babá en contraste de queso de cabra e higos y textura de galani, una variedad de pequeños postres clásicos elaborados en la propia cocina.

El programa no dejó espacio para la improvisación, por lo que además de deleitar al paladar, fue una noche acompañada de un Violinista en vivo, y una sommelier que recorrió las mesas, siendo extremadamente instructiva sobre los vinos a degustar.


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