Gualeguaychú se prepara para un largo corte

GUALEGUAYCHU (DYN).- La Asamblea Ciudadana Ambiental Gualeguaychú se prepara para un largo corte de ruta, al menos durante todo el verano, en el marco de la lucha contra la instalación de la empresa Botnia en Fray Bentos. Además, por estas horas, las diversas asambleas existentes en Colón comienzan a analizar la posibilidad de sumar al de Gualeguaychú, el corte del puente internacional General Artigas, ruta internacional 135, entre Colón y la ciudad uruguaya de Paysandú, siempre sobre el río Uruguay.

En Gualeguaychú, la decisión del Banco Mundial de otorgar el crédito a Botnia, fortaleció a los sectores más duros, los que encabezan el corte de ruta en el paraje de Arroyo Verde, a 28 kilómetros de la ciudad y a sólo 15 del puente General San Martín. Simultáneamente, los asambleístas más cercanos al gobierno, llamado el grupo de «los cancilleres» por su postura moderada, se quedaron con menos argumentos cuando salió el crédito del Banco Mundial.

En ese marco, y más allá de las declaraciones del presidente Néstor Kirchner y del gobernador Jorge Busti, prácticamente puede decirse que hoy tendría escaso consenso una postura de levantamiento del corte de ruta. En ese contexto, un asambleísta instaló en Arroyo Verde, al costado de la ruta, un pequeño parque con hamacas, tobogán y subibaja para los niños, mientras que ya se analizan las posibilidades de autorizar el funcionamiento de un kiosco a beneficio de la Asamblea y de un restaurante privado que se vería perjudicado con el corte del puente, y de ese modo encontraría una compensación.

En tanto, en la Asamblea corren fuertes aires de condena hacia el ingeniero Héctor Rubio, uno de los fundadores de la lucha ambientalista, que en junio pasado viajó a Finlandia y ahora asegura que las plantas no contaminarán el río Uruguay. Esta mañana, la casa del ingeniero Rubio, en el centro de la ciudad, apareció pintada con letras rojas: «Gordo traidor, coimero, las vas a pagar». Varios asambleístas coinciden en que Rubio, con su cambio de postura, favorece el «marketing» de la empresa Botnia. En este marco de endurecimiento, la Asamblea Ciudadana Ambiental Gualeguaychú difundió hoy una carta abierta en la que critica fuertemente a Mauricio Macri -pidió desalojo de la ruta-, Elisa Carrió -dijo que se siente uruguaya- y Roberto Lavagna -apoya un funcionamiento controlado de las papeleras en el río Uruguay-.

La Asamblea apunta que las empresas multinacionales y el Banco Mundial «para doblegarnos también necesitan espadas locales, «mercenarios» que tomen su discurso para confundirnos», en clara alusión a tales dirigentes. «Ustedes son cómplices de la banca mundial, no les interesa que otro país no respete los acuerdos que hemos firmado, y no son democráticos porque no reconocen la voluntad soberana de un pueblo que ha tomado las calles y las rutas para defender el derecho básico de los seres humanos: el derecho a la vida y el derecho territorial sobre el río Uruguay que compartimos con la República Oriental del Uruguay, ambos derechos consagrados por nuestra Constitución», apunta el comunicado. «¿Por qué no vienen a hablar con la Asamblea del Pueblo de Gualeguaychú? ¿Por qué no estudian los acuerdos traicionados? ¿Por qué no se enteran de la verdad? ¿Por qué le tienen miedo a los pueblos en asambleas horizontales, democráticas y abiertas?», preguntan los asambleístas, quienes declaran a Macri, Carrió y Lavagna «traidores a la Patria». Ello marca en la Asamblea una corriente muy fuerte de rechazo a casi toda la dirigente política, en tanto que el gobierno nacional atraviesa horas de «monitoreo» por parte de los asambleístas.