Guardavidas de Neuquén listos para el retiro pero sin amparo legal

Tres trabajadores reúnen la edad y los años de aporte pero no existe una ordenanza que les permita acceder al beneficio. El sindicato insistirá con un proyecto que espera desde 2001.

Los guardavidas de la ciudad de Neuquén volverán este año a la carga con un dilatado reclamo. Desde 2001, cuando se conformó el sindicato que los representa, vienen solicitando una norma que les permita acceder a una jubilación. En 2020 el mismo planteo será nuevamente presentado ante el Instituto Municipal de Previsión Social, ante el Concejo Deliberante y el municipio.


Estos trabajadores aportan como activos un 17% a la caja jubilatoria municipal, durante cinco meses cada año ( por los cuatro años que trabajan en la temporada de verano y un mes más por el aguinaldo).

En la actualidad, de los 130 guardavidas del municipio, hay 3 que tienen 50 años cumplidos y 25 años temporadas continuas (computadas como años) trabajadas con los respectivos aportes y a futuro se sumarían otros 6 o 7 más. Sin embargo, no existe una ordenanza que les permita acceder al beneficio. Tampoco están contemplados en la ley provincial 13.191 que regula las jubilaciones de los trabajadores temporales porque la norma dispone como uno de los principales requisitos contar con aportes realizados al Instituto de Seguridad Social de Neuquén (ISSN).


En este vacío legal se encuentran los guardavidas de la capital desde 2001, sin que ningún proyecto haya logrado convertirse en ordenanza.
Solo en 2002 consiguieron ser incorporados al escalafón municipal para pasar a ser trabajadores activos de la municipalidad y contar con los mismos beneficios que el resto de los agentes, excepto claro, las jubilaciones.

Dato

130
agentes municipales fueron incorporados al operativo de seguridad balnearia 2020-2021.

En 2016, se presentó un proyecto en el Deliberante para otorgar el retiro a los guardavidas, pero luego de un intenso debate, la norma quedó olvidaba.
En líneas generales, lo que reclama el sindicato es que aquellos trabajadores que cumplan con 50 años de edad y 25 temporadas continuas de aportes a la caja previsional municipal, puedan jubilarse. Para esto cada temporada deberá computarse como un año trabajado.


“Por supuesto, el guardavida cobraría el 50% de lo que cobra cualquier otro trabajador municipal, porque solo presta servicios y realiza aportes durante cinco meses. Pero el Estado no puede dejar desamparados a estos trabajadores que no pueden jubilarse de otra forma”, aseguró Ariel Tarifeño, secretario general adjunto del Sindicato de Guardavidas de Neuquén (Sigune).

Para aquellos trabajadores que cuenten con la edad exigida, pero que les falte unos meses de aporte para reunir las 25 temporadas, se propone que puedan acceder al beneficio del retiro, pero que sigan aportando a la caja previsional el resto de los aportes.
En los próximos días el Sigune buscará ser recibido por el titular del IMPS, Daniel Del Collado, para avanzar en una resolución.

El Estado no puede dejar desamparados, sin una ley de jubilaciones, a estos trabajadores que no pueden retirarse de otra forma”.

Ariel Tarifeño, secretario general adjunto del Sindicato de Guardavidas de Neuquén.


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