Jay Kay se cansó de la industria discográfica

Londres (dpa).- Jay Kay, el líder de la banda de funk Jamiroquai, está harto de la industria discográfica y, según anunció el tabloide británico «Sun», tras un último concierto en diciembre no quiere saber nada más de los productores musicales.

«Adoro sinceramente a los fans, pero no puedo soportar el resto de esta porquería», declara al rotativo.

A menos que cambien los jefes de las discográficas, advierte, el evento de diciembre será la última vez que se lo vea.

«Todo esto es una mierda, nadie sabe qué es lo que está pasando. Por eso voy a tomarme una pausa. Puede que no regrese», declara.

Kay acusa a la industria del disco de tomar el dinero y no dar nada a cambio, corrompiendo a los jóvenes en la industria musical británica. Además, le achaca haber fracasado a la hora de lograr que su banda tuviera éxito en los Estados Unidos.

«Toda la industria musical está construida sobre el robo, le cuentan a los chicos que es «su» canción aunque fuera un éxito hace 25 años. Es un asco».

«Es exactamente lo que no quería hacer cuando empecé. Quería hacer algunas canciones y cantar. Pero este trabajo es una maldita pesadilla. ¿Quién puede aguantar este mundo estéril?», se pregunta.

«No tengo tiempo para esto, quiero tomarme un descanso y olvidarlo», se contesta a sí mismo en el «Sun».

El líder de Jamiroquai también ataca a su compañía, Sony, por no haber logrado que su grupo tuviera éxito en los Estados Unidos, pese a que ganaron un Grammy por «Virtual Insanity» en 1998.

Quiere que Sony lo libere del acuerdo por el que tiene que grabar ocho álbumes, de los que hasta el momento han salido cinco. «He vendido 27 millones de álbumes», recuerda.

«Llega un momento en que tienes que decir: «Si ya no puedes lograr que mi disco suene en la radio, entonces no voy a volver».

«Tengo la sensación de que estoy sosteniendo a la compañía de discos y no soy feliz».

«Me voy a ir y quizás, cuando la industria se recupere, volveré y haré algo que merezca la pena».

Además, el cantante Jay Kay se queja en el «Sun» de que la vida que lleva y las presiones de las giras le impiden asentarse y mantener una relación sentimental seria.

«Quiero hijos. No quiero llegar a los 38 años y mirar alrededor mío cómo todos tienen una vida agradable y estable mientras que yo sigo viajando con una bolsa».