Se vencieron plazos y un condenado por doble tentativa de femicidio en Neuquén logró la prisión domiciliaria
Estará en una vivienda con custodia policial permanente hasta que le coloquen una tobillera, y después lo vigilarán con tres rondines diarios.
El condenado estaba con prisión preventiva desde el 7 de marzo del 2023. (Archivo/Andrea Vázquez)
El proceso judicial por una doble tentativa de femicidio en Picún Leufú demandó un plazo exageradamente largo y eso jugó en beneficio del condenado, quien logró una prisión domiciliaria por lo menos hasta la próxima audiencia, el 19 de junio.
El acusado es Luis Alberto Perouene, de 62 años, quien fue declarado responsable de la tentativa de femicidio de su ex pareja y de su hija. El hecho ocurrió en Picún Leufú el 28 de febrero del 2023.
Le dictaron la prisión preventiva pocos días después, el 7 de marzo del 2023. En una audiencia realizada el 30 de abril pasado la fiscal Gabriela Macaya pidió la extensión, el defensor particular Maximiliano Orpianessi se opuso, y el tribunal integrado por los jueces Félix Borgonovo, Ignacio Pombo y Eduardo Egea le concedió la domiciliaria.
El 2 de mayo un tribunal revisor, integrado por Leticia Lorenzo, Mario Tommasi y Laura Barbé la confirmó, por lo que en este momento el hombre está en una vivienda, en otra ciudad distinta de Picún Leufú, con custodia policial permanente a la espera de que le coloquen una tobillera electrónica.
Las fechas claves
¿Qué pasó para que se extendieran de tal manera los plazos? ¿Fue correcta la decisión de darle prisión domiciliaria?
El caso invita a un debate puertas adentro del Poder Judicial, y la cronología del caso es importante.
Perouene fue detenido el mismo día del hecho, porque luego de intentar matar a su ex pareja y a su hija, trató de suicidarse pero no lo logró. El 7 de marzo le impusieron prisión preventiva.
El 5 de julio del 2023, la fiscalía de Cutral Co que intervino en el hecho presentó la acusación para ir a juicio, y la defensa lo hizo el 7 de agosto. Hasta allí, los plazos venían corriendo con normalidad.
Pero la audiencia de control de acusación, en la que se define la elevación a juicio del legajo, se realizó recién el 19 de octubre, y el juicio ante un tribunal colegiado se concretó entre el 18 y el 20 de marzo de este año.
El 25 de ese mes lo declararon responsable de tentativa de homicidio agravado por el vínculo, por mediar violencia de género y por la utilización de arma de fuego, (por el ataque a su expareja), en concurso real con tentativa de homicidio agravado por la utilización de arma de fuego (en lo referido a la hija de la mujer).
La postergación
Sólo faltaba el juicio de cesura, en el cual le debían imponer la pena a cumplir. Perouene siguió con prisión preventiva todo ese tiempo. La última prorroga se dispuso en noviembre del 2023, con fecha de vencimiento el día que finalice el juicio de cesura.
El 30 de abril pasado se reunió el mismo tribunal que lo había declarado responsable para realizar el juicio de cesura pero se lo postergó porque faltaron testigos (al parecer no fueron notificados). Se fijó como nueva fecha, por una cuestión de agendamiento, el 19 de junio próximo.
El defensor Orpianessi planteó ante el tribunal que su cliente había cumplido con creces el año de prisión preventiva que el Código Procesal Penal fija como máximo. Ofreció una vivienda, en otra ciudad, para que el condenado pase a cumplir detención domiciliaria.
El Tribunal integrado por Borgonovo, Egea y Pombo se encontró ante una disyuntiva: se había constituido para un juicio de cesura, y le estaban pidiendo una decisión vinculada con la preventiva que le hubiera correspondido resolver a un juez de Garantías.
La domiciliaria
La fiscalía no argumentó sobre los riesgos de otorgarle domiciliaria, el Tribunal entendió que correspondía cumplir lo que marca el Código, y mandó a Perouene al domicilio en cuestión. Con varias salvedades: custodia policial permanente hasta que le coloquen una tobillera, y tres rondines diarios una vez que tenga el dispositivo.
Perouene fue advertido: no puede ni asomarse a la vereda, y para cualquier trámite -por ejemplo, ir al médico- requiere autorización judicial.
En una audiencia posterior, realizada el 2 de mayo a pedido del fiscal jefe Gastón Liotard, otro tribunal integrado por Lorenzo, Tommasi y Barbé ratificó la domiciliaria. Y así seguirá por lo menos hasta el juicio de cesura del 19 de junio, cuando le fijarán la pena que deberá cumplir.
Comentarios