Un tercio de los casos de violencia de género en Neuquén se denuncian en la justicia de Paz

Los juzgados de Paz suelen ser el primer contacto que tienen las víctimas de violencia de género, en las pequeñas localidades de Neuquén, con el sistema judicial. Tres de cada diez denuncias por ley 2785 que se radicaron en el centro y norte de la provincia, durante el segundo semestre de 2024, fueron en estas oficinas. Incluidas las que se hicieron finalizado el horario hábil (después de las 14 hs), fines de semana y feriados. El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) busca modificar el sistema de guardias.

Los datos por circunscripción judicial (que ahora se transformarán en regiones) permiten ver la geografía de la demanda.

Por ejemplo, quienes viven en Neuquén capital y Rincón de los Sauces (Confluencia y Vaca Muerta) denuncian situaciones de violencia de género en la justicia de Familia o en las Oficinas de Violencia del Poder Judicial. En Añelo, Plottier y San Patricio del Chañar la puerta de ingreso son los juzgados de Paz. Lo mismo ocurre en lo que sería hoy la región del Limay, con Picún Leufú, o en los Lagos del Sur con Piedra del Águila y Villa Traful.

El salto se produce en el centro. Concentran el 36% de las denuncias: 84% de lunes a viernes, de 8 a 14 hs, 14% en horario inhábil y 2% los fines de semana y feriados. Aluminé, Loncopue, Las Lajas, Mariano Moreno, Villa Pehuenia tienen los mayores requerimientos.

En el norte, Alto Neuquén, el 33% va a los juzgados de Paz: 79% de lunes a viernes, de 8 a 14 hs, 14% en horario inhábil y 6% los fines de semana y feriados. Las localidades con más actividad son Andacollo, Buta Ranquil, Las Ovejas, Barrancas y Taquimilán.

Con estos datos, el TSJ probará con cambiar el esquema de atención, incorporando a la guardia provincial de la Oficina de Violencia como un paso previo a que actúe el juez o jueza de Paz local, cuando se denuncia fuera del horario habitual.

Isabel Van Der Walt, asistente de presidencia, explicó a Diario RIO NEGRO, que estos funcionarios y funcionarias «reciben las denuncias de violencia de género de la localidad a la que pertenecen, donde no hay cabecera de circunscripción, es decir, donde no hay un juzgado de Familia». «Como consecuencia de eso, el juez de Paz en esas localidades está de guardia 24/7», agregó.

El TSJ testeará un nuevo mecanismo en los próximos meses: que actúe en primer término el servicio provincial de guardia de la Oficina de Violencia de 14 a 8 hs, sábados, domingos y feriados. De este cambio además deberían notificarse las comisarías, centros de salud y la Línea 148.

«En el horario de trabajo, el juez de Paz de la localidad que no tiene cabecera va a atender normalmente las denuncias de violencia de género, pero vamos a comenzar con un trabajo con el servicio provincial de guardia para que fuera del horario de trabajo, del horario hábil, primero intervenga este servicio. Y una vez que intervino, que realizó el despeje, si hay que tomar medidas cautelares, va a llamar por teléfono al juez de la localidad», afirmó Van Der Walt.

Indicó que una vez cumplida esta etapa «vamos a analizar los números de atención, en función de eso es cómo vamos a continuar».

Esto no quita, remarcó, que si llaman directamente a un juez de Paz «no pueda hacer su tarea sin la intervención del servicio. El tema es poder uniformar la atención, informar a nuestros servicios provinciales de guardia de las realidades de cada localidad para que también ellos cuenten con esa información y con esas herramientas. A veces si llega un requerimiento al juzgado de Familia de cabecera, pero la persona vive en alguna de esas localidades, también es importante que se sepa cuáles son los recursos con los que cuenta la comunidad».