La caja jubilatoria municipal de Neuquén volvió al superávit

El administrador José Arnoldo Martínez logró equilibrar las cuentas del IMPS. Funcionó la retención de empleados que se podían jubilar con 30 años de servicio.

El administrador del Instituto Municipal de Previsión Social (IMPS) reveló a “Río Negro” que las cuentas de la caja jubilatoria municipal dan superávit y sostuvo que la cifra positiva mejorará antes de fin de año, pero no quiso revelar los datos.

Explicó que esperará a que finalice la auditoría externa para informar sobre el proceso a una asamblea de asociados en poco menos de un mes. Sin embargo, insistió en que “se logró el equilibrio y ya tenemos superávit”.
Con el cambio de mando en la comuna, el intendente electo, Mariano Gaido, deberá nombrar al nuevo titular en el organismo.

La solución estaba, lo que pasa es que políticamente no se analizó y desde acá no supieron plantear la solución” a las autoridades, dijo Martínez.
Insistió en que entre el debe y el haber de los gastos de funcionamiento, el resultado es positivo en varios millones. “Todo esto va a surgir con el informe final de la auditoría”, insistió.

Martínez explicó que para el equilibrio fueron fundamentales los aportes de los empleados activos, tanto la suba del porcentaje que se pagaba hasta 2018, como los incremento salariales que por ordenanza, van a parar íntegramente el primer mes a las arcas de la caja jubilatoria.
Detalló que la deuda previsional acumulada hasta el año pasado alcanzaba casi a los 163 millones de pesos.

En números

600 000
pesos anuales es el ahorro promedio en la caja jubilatoria por cada empleado del régimen especial que logran retener.
600
municipales en los próximos años se podrán retirar con 30 años de servicios. Buscan que el Ejecutivo aporte el esquema.

Esa cifra se redujo a 19 millones a agosto de este año, aseguró.
Sostuvo que esto se logró con los mayores ingresos provenientes de los descuentos a los empleados activos, sumado al plan de retención de los municipales que se podrán jubilar por el régimen especial y las medidas de ajuste en los gastos de funcionamiento. Incluyó desvinculaciones en los 6 complejos de turismo y casi 10 licencias sin goce de haberes en la administración central del organismo.

Aclaró que en los complejos de veraneo se aumentó la erogación en mejoras de un mantenimiento que estaba descuidado.
Martínez ejemplificó que desde abril logró retener a 30 empleados que se iban por el retiro de los 30 años de servicio.

Explicó que cada jubilado de este régimen involucra una erogación anual promedio para la caja previsional de 790.00 pesos, que se tradujo en 120.000 pesos anuales cuando el empleado acordó la permanencia a cambio de un plus de 12.000 pesos por mes a su salario.

Sobre el plan de ajuste señaló que se redujeron drasticamente los montos de cortesías y homenajes, viáticos y horas extras.
“A valore s de agosto 2019, estoy gastando el mismo presupuesto que en 2016 y 2017”, aseguró.

Una medida antipática, explicó, fue el cese de los préstamos que se hacían a los empleados. En este rubro, sólo se registraron ingresos por los pagos de los créditos otorgados hasta el 2018.

“Hay responsabilidades compartidas (con el Ejecutivo y el Deliberante) y esto también lo señaló la auditoría”, aclaró Martínez.
“Recuperamos el equilibrio”, insistió el administrador.


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