La selección Sub-23 se juega buena parte de la clasificación
Enfrentará a Uruguay, que también viene muy golpeado.
LONDRINA (DyN, enviado especial).- Después de la inobjetable derrota que le propinó Brasil, el seleccionado argentino Sub-23 saldrá a responder esta tarde, cuando enfrente a Uruguay, si el golpe recibido en el comienzo de la fase final del Preolímpico fue lo suficientemente duro como para herirla de muerte o sí, por el contrario, aún tiene derecho a seguir soñando con clasificarse para los Juegos de Sydney 2000.
A las 18.30, con el arbitraje del ecuatoriano Byron Moreno y en el estadio «Do Café» de esta ciudad, el equipo de José Pekerman se jugará prácticamente todas sus chances de estar en Sydney ante los uruguayos, que llegarán igualmente apremiados luego del sorprendente 4 a 1 que les aplicó Chile, rival de Brasil en el segundo turno, a las 20.40, bajo las órdenes del colombiano Henry Cervantes.
Además de necesitar un triunfo propio, al conjunto nacional le sentaría muy bien una victoria de los brasileños sobre Chile, ya que de ese modo Argentina llegaría a la última fecha sabiendo que ganándole a los trasandinos se aseguraría uno de los dos boletos para los Juegos.
Un eventual empate ante Uruguay, en cambio, dejaría a Argentina en una posición demasiado incómoda. En ese caso, debería ganarle el domingo a los chilenos por la mayor diferencia de goles posible y esperar un resultado que la favorezca en el partido entre los «charrúas» y los locales.
Pero no sólo las especulaciones numéricas asoman complicadas para Argentina, equipo que además intentará vengar la derrota sufrida en la última fecha de la fase inicial, en Cascavel, cuando fue perjudicado por el arbitraje del brasileño Luciano Almeida y los uruguayos estuvieron a un gol de darle a Perú el pasaje a la fase final.
Sería preocupante que Pekerman esté convencido, como expresó en la conferencia de prensa posterior al encuentro con Brasil, de que su equipo jugó «un gran partido».
Desorientada por el aluvión futbolístico que de a ratos Brasil le tiró encima, Argentina cayó sin ningún tipo de atenuantes y cumpliendo nuevamente una pobre actuación, lo cual impide aventurar que hoy se producirá una rápida reacción ante los uruguayos. Al cabo, el equipo no logró jugar medianamente bien en ninguna de sus cinco presentaciones.
Si bien Pekerman confirmaría la formación hoy en el estadio, se espera que realice al menos dos variantes. Diego Placente y Diego Markic volverían a la titularidad después de haber cumplido su fecha de suspensión, aunque el nombre de sus eventuales reemplazados es una verdadera incógnita.
No menos golpeados por el 4 a 1 con que perdieron ante Chile, los uruguayos presentarían tres o cuatro variantes.
La dinámica del torneo exige a Argentina y Uruguay salir a jugar de nuevo en menos de 48 horas y, para colmo, con la certeza de que una nueva derrota -y hasta un empate- los pondría a las puertas del fracaso.
Para Milito no hay que buscar excusas
El defensor del Sub-23 argentino Gabriel Milito señaló que «no hay que buscar excusas, porque se perdió con Brasil» por la primera fecha de la etapa final del Preolímpico que clasificará para los Juegos de Sydney 2000 y prefirió subrayar la necesidad de «sumar los tres puntos contra los uruguayos y si es posible jugando bien al fútbol».
«Quizás nos favorezca que ellos también estén obligados a ganar», agregó Milito, quien evitó calentar la previa del clásico rioplatense al comentar que «hay que jugar fuerte pero leal».
Por último, dejó una frase que da cuenta de las sensaciones que vive el equipo argentino.
«Ahora estamos un poco más tranquilos porque ya pasaron varias horas del partido con Brasil, pero está claro que no estamos como quisiéramos. De todos modos, sabemos que dependemos de nosotros mismos», apuntó el defensor, quien resultó una de las figuras que tuvo el seleccionado argentino antenoche cuando perdió frente a Brasil.
Sólo algunos hablaron
LONDRINA (DyN, enviado especial).- Como para despejar cualquier duda sobre cuál es el estado de ánimo de los jugadores argentinos, los defensores Leandro Cufré y Gabriel Milito (ver aparte), y el delantero Bernardo Romeo fueron los únicos que ayer hablaron con el periodismo luego de la dura derrota 4 a 2 ante Brasil, que comprometió las chances del Sub-23 de clasificarse para los Juegos Olímpicos de Sydney 2000.
Los tres jugadores dieron la cara en nombre de todos sus compañeros antes de almorzar y después de haber mantenido una reunión grupal -de la que no participó el cuerpo técnico- en la que el plantel se juró «dejar todo para tratar de clasificar», según contó Romeo, autor del primer gol ante Brasil.
Cufré comentó que ya se les «pasó la bronca» por haber perdido con Brasil porque saben que hoy, ante Uruguay, «no queda otra que jugar a muerte y ganar para llegar con chances al partido del domingo con Chile», que se medirá con Brasil en el choque entre los dos ganadores de la jornada inicial (los trasandinos golearon 4 a 1 a los «charrúas»).
«Brasil jugó muy bien, no hay que negarlo, pero creo que nosotros cumplimos el mejor partido del Preolímpico», comentó sorpresivamente Cufré, en consonancia con el discurso del entrenador José Pekerman, quien antenoche, en la conferencia de prensa, aseguró estar «orgulloso porque Argentina fue fiel a su historia de salir a ganar esta clase de partidos».
A diferencia de Cufré, Romeo fue mucho más autocrítico y sensato al sostener: «No hay que ser necios. Brasil nos ganó bien y tenemos que mejorar».
Con el semblante serio al igual que sus otros dos compañeros, el delantero de San Lorenzo de Almagro vaticinó que ante Uruguay «será un partido muy duro. Ellos también necesitan ganar».
«Como Uruguay también está obligado a ganar, por ahí salen un poco y dejan algunos espacios que podemos llegar a aprovechar», amplió Romeo, quien reclamó que «los árbitros tengan un poquito de categoría» al dirigir en la ronda final, en obvia alusión al flojo trabajo del brasileño Luciano Almeida en el partido que los «charrúas» le ganaron 2 a 1 a Argentina en Cascavel por la última fecha de la fase inicial.
Para Cufré, quien negó que el equipo esté «cansado mentalmente», frente a Uruguay «se va a poner más que de costumbre porque será un partido muy especial».
Argentina aún depende de sí mismo para conseguir el pase a Sydney pues si gana los dos últimos juegos, ante Uruguay y Chile, se clasificará sin pensar en otros resultados.
Si empata hoy con Uruguay aún tendrá chance de clasificarse con un triunfo sobre Chile en la última fecha, aunque en ese caso estará pendiente de que Brasil no pierda ninguno de sus dos partidos antes esos mismos adversarios.
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