La UTN consolida su presencia en Bariloche

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El empuje de varios emprendedores locales y la receptividad encontrada en la Universidad Tecnológica Nacional-regional Buenos Aires permitieron echar a rodar un proyecto que hasta hace muy poco parecía inabordable.

Desde hace alungas semanas los primeros 64 alumnos ya están cursando las primeras materias de ingeniería mecánica en el asentamiento barilochense de la UTN.

La nueva propuesta educativa funciona por ahora en dependencias del CEM 51 (ex Enet) y está llamada a cambiar el mapa de la oferta universitaria de la ciudad.

La UNC cuenta en Bariloche con 1.120 alumnos, distribuidos en las carreras de técnico en acuicultura, profesorado de educación física, profesorado y licenciatura en ciencias biológicas, profesorado de matemática, licenciatura en historia (a término) y desde hace años también el ciclo inicial de ingeniería civil, en petróleo, eléctrica y electrónica, cuyos estudiantes deben viajar a Neuquén para completar la carrera.

Hace 11 años también se instaló en Bariloche la universidad privada FASTA, donde es posible estudiar abogacía, procuración, licenciatura en sistemas, ingeniería informática, contador público y licenciatura en comunicación social; aunque con la limitación de que es confesional y arancelada. Hoy tiene 620 alumnos. Otra institución en la misma franja es el Instituto Balseiro, si bien se trata de una propuesta orientada a la formación de excelencia y muy acotada en vacantes.

La irrupción de la UTN en este panorama abre una opción nueva, con amplia perspectiva de crecimiento. El ingeniero de Invap Gustavo Wiman es el coordinador de la nueva unidad académica, quien explicó que el impulso inicial del proyecto es responsabilidad de la Asociación de Innovadores Tecnológicos (AIT). Wiman explicó que este año empezaron a funcionar como una «extensión áulica» de la UTN-facultad regional Buenos Aires. Aspiran a crecer de manera progresiva, con la posibilidad de tener una sede propia en el mediano plazo y también la de transformarse en una nueva regional de la UNT.

Wiman dijo que la iniciativa surgió en la AIT luego de observar «varios problemas a resolver en la región», entre los que mencionó «la demanda insatisfecha en el área de ingeniería (lo cual obligaba a muchos jóvenes a enfrentar el costo y el desarraigo de estudiar fuera de Bariloche), el déficit local de ingenieros y la falta de una entidad universitaria que acompañe» la implantación de un polo tecnológico como el que Bariloche pretende desarrollar.

Explicó que en esta primera etapa son 64 los alumnos que empezaron a cursar ingeniería mecánica. «La población estudiantil irá creciendo a medida que los alumnos pasen a niveles superiores y se abran nuevas especialidades» sostuvo Wiman. La intención es iniciar cuanto antes ingeniería electrónica.

El primer cuerpo de docentes se conformó con una convocatoria abierta a profesionales de Bariloche, que fueron nombrados de manera interina hasta que puedan realizarse concursos.