Las clases públicas coparon el centro de Bariloche

El reclamo por la falta de presupuesto para la universidad pública se trasladó a las calles con clases, juegos y una marcha.

Las clases públicas coparon el centro de Bariloche

Nuestras aulas hoy son las calles”, resaltaban los docentes al comienzo de cada clase pública a lo largo de siete cuadras de la calle Mitre.

La protesta comenzó a las 9 con una clase pública en la base del cerro Catedral sobre “Universidad y esquí escolar en defensa de la educación pública”. A partir de las 14, le siguieron 14 clases en las esquinas de la calle Mitre. “Neoliberalismo y educación”, “Jugar en el espacio público”, “Efectos contemporáneos del genocidio indígena”, entre otros, fueron algunos de los temas que se abordaron.

Previamente a las clases, se leyó un documento consensuado entre las universidades.
Marcelo Martínez

“Salir a la calle se decidió en una asamblea interclaustro entre docentes, no docentes y estudiantes la semana pasada. No solo con una marcha sino con clases públicas para dar muestras de estar abiertos a la comunidad. La universidad no quiere ser una isla”, detalló Cecilia Fourés, una docente del Centro Regional Universitario Bariloche (Crub) y Universidad Nacional de Río Negro mientras organizaba su clase a 50 metros del Centro Cívico.

Frente al municipio, en una bandera gigante se leía: “En defensa de la educación y la universidad pública”. En la plaza, integrantes de la carrera de Enfermería del Crub se preparaban para dar una clase sobre técnicas de RCP básico, control de signos vitales y control glucémico.

“Estamos acá para hacer notorio lo que pasa en la universidad”, dijo antes de comenzar rodeada de estudiantes de otras carreras y turistas.

Se dictaron unas 15 clases públicas en la calle Mitre, en el Centro Cívico y en el cerro Catedral.
Marcelo Martínez

Todas las clases comenzaron con la lectura de un documento consensuado. “En las últimas cuatro semanas, 57 universidades nacionales desplegaron todo su potencial de estudiantes y docentes para llenar las calles de militancia en función de los derechos de todos”, decía uno de los fragmentos.

Rosana Marina Valli, una profesora de Biología, fue contundente: “En 40 años de docencia, es el hecho más movilizador que he vivido después de la Marcha Federal de los 80. Este hecho pequeño tiene una fuerza particular por todas las redes que se tejieron”.


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