Llanto en el final de un juicio por violento robo
BARILOCHE (AB).- Fabián Gallardo se puso de pie para pronunciar sus últimas palabras ante el Tribunal. Cerca suyo estaba un amigo que sollozaba, con la cabeza gacha. “La Policía me persigue desde chiquito –afirmó Gallardo–. Y no sé por qué quieren hacerme cargo de esto”. “No tengo vergüenza de decir que siempre voy a ser amigo de Diego Bonnefoi. Créanme que soy inocente”, aseguró, a voz quebrada. Luego, salió esposado del edificio de Tribunales hasta el Penal 3, donde está alojado desde febrero pasado. Minutos antes, el fiscal de Cámara subrogante Guillermo Lista había pedido a los jueces de la Cámara Criminal Primera que le impongan 6 años de cárcel a Gallardo como supuesto autor de un violento robo con arma en perjuicio de una mujer. Sólo tuvo en cuenta como atenuantes que tiene 18 años y no tiene antecedentes penales. A Gallardo se le atribuye el hecho que ocurrió a las 7 del 20 de febrero pasado. Según la acusación, el imputado y un adolescente de 15 años sorprendieron a una mujer que esperaba el colectivo en una garita de la calle Sobral y Ruta 40. El menor portaba un arma calibre 22 con ocho proyectiles. Los sujetos intimidaron a la mujer y le ordenaron que entregara la cartera. Ella obedeció y, antes de huir, Gallardo habría ordenado a la víctima que se arrojara al suelo y le habría dado una patada en la cabeza. La mujer fue a la Comisaría 28ª, describió cómo estaban vestidos los asaltantes y minutos después una mujer policía vio que dos sujetos pasaban cerca de la unidad vestidos como había indicado la damnificada. Los policías salieron tras ellos y los detuvieron. Gallardo intentó escapar y golpeó a una mujer policía en el pecho, pero no logró huir. En las inmediaciones encontraron el arma. El defensor particular Nelson Vigueras señaló ayer en su alegato que no hay pruebas objetivas. Advirtió que no se acreditó que el arma secuestrada haya sido utilizada por el joven. Y destacó que no hay testigos. Explicó que Gallardo corrió porque siempre sufre persecución policial. Por eso, pidió la absolución. Gallardo explicó a los jueces que tiene cuatro denuncias por apremios policiales de cuando era menor. “Me torturaron, me golpearon y, por eso, siempre voy a correr de la policía”, afirmó.
BARILOCHE (AB).- Fabián Gallardo se puso de pie para pronunciar sus últimas palabras ante el Tribunal. Cerca suyo estaba un amigo que sollozaba, con la cabeza gacha. “La Policía me persigue desde chiquito –afirmó Gallardo–. Y no sé por qué quieren hacerme cargo de esto”. “No tengo vergüenza de decir que siempre voy a ser amigo de Diego Bonnefoi. Créanme que soy inocente”, aseguró, a voz quebrada. Luego, salió esposado del edificio de Tribunales hasta el Penal 3, donde está alojado desde febrero pasado. Minutos antes, el fiscal de Cámara subrogante Guillermo Lista había pedido a los jueces de la Cámara Criminal Primera que le impongan 6 años de cárcel a Gallardo como supuesto autor de un violento robo con arma en perjuicio de una mujer. Sólo tuvo en cuenta como atenuantes que tiene 18 años y no tiene antecedentes penales. A Gallardo se le atribuye el hecho que ocurrió a las 7 del 20 de febrero pasado. Según la acusación, el imputado y un adolescente de 15 años sorprendieron a una mujer que esperaba el colectivo en una garita de la calle Sobral y Ruta 40. El menor portaba un arma calibre 22 con ocho proyectiles. Los sujetos intimidaron a la mujer y le ordenaron que entregara la cartera. Ella obedeció y, antes de huir, Gallardo habría ordenado a la víctima que se arrojara al suelo y le habría dado una patada en la cabeza. La mujer fue a la Comisaría 28ª, describió cómo estaban vestidos los asaltantes y minutos después una mujer policía vio que dos sujetos pasaban cerca de la unidad vestidos como había indicado la damnificada. Los policías salieron tras ellos y los detuvieron. Gallardo intentó escapar y golpeó a una mujer policía en el pecho, pero no logró huir. En las inmediaciones encontraron el arma. El defensor particular Nelson Vigueras señaló ayer en su alegato que no hay pruebas objetivas. Advirtió que no se acreditó que el arma secuestrada haya sido utilizada por el joven. Y destacó que no hay testigos. Explicó que Gallardo corrió porque siempre sufre persecución policial. Por eso, pidió la absolución. Gallardo explicó a los jueces que tiene cuatro denuncias por apremios policiales de cuando era menor. “Me torturaron, me golpearon y, por eso, siempre voy a correr de la policía”, afirmó.
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