Los anglicanos permitirían a los divorciados casarse
La Iglesia lo estudia. Piden auténtico compromiso con la nueva pareja. La idea abre las puertas del matrimonio a Carlos y Camila. El arzobispo de Winchester hizo público un informe sobre el tema.
LONDRES (EFE).- La Iglesia Anglicana se está planteando la posibilidad de que puedan volver a casarse los divorciados que manifiesten un auténtico compromiso con su nueva pareja, idea que de seguir adelante abrirá las puertas del matrimonio al príncipe Carlos y a su novia, Camila Parker-Bowles.
El arzobispo de Winchester, el reverendo Michael Scott-Joynt, ha sido el artífice de una serie de recomendaciones para los sacerdotes sobre esos nuevos matrimonios, que se han publicado ayer.
Con su informe, el reverendo pretende normalizar un hecho que se da con asiduidad en las parroquias locales, donde los sacerdotes, conmovidos por las historias de parejas que quieren rehacer sus vidas, optan por casarlas de nuevo.
“La Iglesia Cristiana, desde el inicio, ha vivido con la realidad de que algunos matrimonios llegan a un final, algunas parejas acaban”, ha comentado Scott-Joynnt. Precisamente, el mismo rey Enrique VIII, cabeza de la Iglesia Anglicana, rompió con el Papa en 1532, para separarse de Catalina de Aragón y casarse con Ana Bolena.
Los datos confirman que casi el cincuenta por ciento de los matrimonios que se celebran al año en el Reino Unido terminan en divorcio.
Sin embargo, “en muchas situaciones, hay razones pastorales lo suficientemente fuertes en las personas como para volver a unirlas en matrimonio”, explica el reverendo.
Según su manual de recomendaciones, se dejará discrecionalidad absoluta a los sacerdotes para decidir si su moral les permite o no volver a casar a una pareja. “La decisión no se impondrá”, precisa.
El tema de los hijos
Además sólo se podrá llevar a cabo la ceremonia en determinadas circunstancias, y únicamente si los esposos están convencidos de su compromiso con la otra persona.
En su documento, el arzobispo de Winchester insta a los clérigos a analizar con minuciosidad, antes de decidir, las causas por las que la pareja opta por una nueva boda y si superó los fallos de su vida anterior.
Un factor de gran peso a considerar será el tema de los hijos, si los hubiera, y cómo podría afectarles la posibilidad de que sus padres se casaran de nuevo.
Las repercusiones en el vecindario también se tendrán en cuenta, para evitar escándalos o comentarios hostiles.
Otra de las recomendaciones es que los esposos se casen como máximo dos veces.
“Muchas personas demuestran que no están preparadas para un nuevo matrimonio, y aunque solicitan nuestra aprobación, no podemos aceptarla”, precisa el arzobispo en su informe.
“No se casará de nuevo a todo aquél que lo pida, haya hecho lo que haya hecho durante su anterior matrimonio”, puntualizó Scott-Joynnt.
El documento pasará ahora por las distintas diócesis del país para su análisis pertinente antes de ser transmitido a la jerarquía superior de la Iglesia Anglicana, para su debate en el Sínodo General, a finales de este año.
La aceptación de estos criterios, llevaría a la revocación del Protocolo de 1957 de la Asamblea de Canterbury.
LONDRES (EFE).- La Iglesia Anglicana se está planteando la posibilidad de que puedan volver a casarse los divorciados que manifiesten un auténtico compromiso con su nueva pareja, idea que de seguir adelante abrirá las puertas del matrimonio al príncipe Carlos y a su novia, Camila Parker-Bowles.
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios