«Manu» ilusiona a todos con el espectacular juego en su debut más soñado

Al bahiense no le tembló el pulso en su debut en la NBA y ante el último campeón, Los Angeles Lakers. San Antonio Spurs le arruinó la ceremonia de la entregas de anillos a Los Angeles Lakers.

En el repleto «Staple Center», Emanuel Ginóbili fue una de las claves en el triunfo por 87-82 sobre los últimos campeones de la NBA.

Los tricampeones llegaban sin una de sus principales figuras, Shaquille O»Neal, quien se está recuperando de una operación en el dedo del pie, y Rick Fox, suspendido por seis partidos. Y eso les pesó. Porque su otra gran figura, Kobe Bryant, no pudo solo.

El escolta bahiense fue decisivo. Pisó la cancha por primera vez cuando faltaban 3m15s para que terminara el primer cuarto, en reemplazo de Steve Smith, como en toda la pretemporada y enseguida comenzó a tomar participación en el juego.

«Manu» comenzó a mostrarse y como demostrando que la NBA está hecha para él, abrió su cuenta personal con un triple (el primero del partido).

El «bombazo» le dio a los Spurs una ventaja de 22-13 a 58s del cierre.

En el segundo parcial, el técnico Gregg Popovich decidió mantenerlo en cancha, pero en los primeros cinco minutos, no volvió a convertir, tras fallar dos tiros, y cometió una falta personal.

En el tercero, estuvo en el banco hasta que por una lesión en el tobillo de Smith, el entrenador lo incluyó hasta el final. En los momentos decisivos fue un elemento clave para el equipo de San Antonio, que entraron a los últimos diez minutos tres puntos arriba (65-62).

La mejor jugada de la noche se produjo cuando en el reloj quedaban 1m32s: el bahiense, en transición, le robó la pelota nada menos que a Bryant (goleador del juego con 27 puntos) y al recuperarla asistió a Speedy Claxton para que la ventaja de San Antonio llegara a ocho.

Así, «Manu» cerró una planilla con siete puntos (1/4 en triples y 2/5 en dobles), cuatro robos, tres asistencias, dos rebotes, dos perdidas, en veinte minutos en el campo.

Esta buena actuación y la lesión de Smith, de la que aún no hubo parte médico, le permitirán a Ginóbili ganar más protagonismo.

Opinión, por Oscar Sánchez: ¡Qué alegría que nos da!

Una vez más me sorprendió en su manera de actuar.

Increíblemente absorbió lo que fue una impactante ceremonia previa y un rival que si bien jugaba sin «Shaq», era el actual campeón de la NBA.

Su debut fue muy bueno; mucho más de lo que hubiéramos imaginado. Su falta de partidos previos en pretemporada y su tobillo, aun no al 100%, ponían en ascuas su perfomance. Todo lo contrario. Realizó demasiadas cosas, gracias a la tremenda confianza que le tienen, desde el dueño de la franquicia hasta su entrenador Popovich.

Sumó 20 minutos, tomó tiros exteriores y penetraciones punzantes, bien a su estilo. Siempre se incorporó al ataque rápido para buscar su definición.

En defensa estuvo muy activo, defendió a Kobe por momentos y no pasó papelón alguno, robó balones y tuvo una gran cuota de intuición para recuperar pelotas.

Creo que fue el debut soñado. Más allá que no fue un gran juego en general, (típico de inicio de temporada) sobresalió ante tantos monstruos consagrados. Hizo lo que acostumbra como filosofía personal: desafiar los momentos que se le atraviesan en su carrera. Este era el más importante, el máximo nivel de competencia mundial. No falló, jugó como siempre, de la misma manera que su debut en liga contra Peñarol, sin inhibiciones, no importarle quien estaba en frente. En ningún momento se mostró con síntomas de inseguridad. Increíble.

Para ser figura en la NBA, le falta tiempo, tiene lo más importante: talento y Personalidad.

Sus debilidades como la contextura física se mejorara en el termino de 8-10 meses, y su tiro, que es la única asignación pendiente, con tiempo de práctica y los entrenadores idóneos en la técnica del lanzamiento.

Pero no hay dudas que en los próximos dos años, nos encontraremos con una figura sobresaliente en la mejor competencia mundial.

«Es un caradura»

«El sólo hecho de llegar a la NBA es una hazaña. Pero además jugó bien en su debut, lo que es altamente positivo. Lo que hizo fue típico de un caradura, no le pesó la responsabilidad. Creo en dos meses más será titular».

Para el técnico Mario Spada, el debut de Emanuel Ginóbili fue por demás interesante, por lo que a la hora de las críticas no ahorró palabras de elogio.

«Llegó al equipo ideal. San Antonio se caracteriza por su juego estacionado con las dos torres (Robinson y Duncan) que tiene abajo del tablero, y «Manu» llegó para darle velocidad y juego exterior. Además roba pelotas, asiste, es capaz de hacer cualquier cosa en una cancha», remarcó el ex técnico de Deportivo Roca.

«No sé qué puede pasar en el futuro, pero seguro va a ser muy bueno para él. Este será un año para «acomodarse», pero de seguir así creo que en un par de meses será titular», agregó.

Por último Spada recordó que «ni grandes estrellas como Jordan, Pat Ewing o Shaquille O»Neal fueron extraordinarios en sus primeros años. Las figuras de la NBA no comenzaron siendo figuras, se hicieron después».

Voces: Para Popovich «ganó el partido»

Además de la muy buena crítica de la prensa especializada, Ginóbili recibió los mejores elogios de su entrenador, lo que en definitiva fue lo más importante para el bahiense.

Con un «Manu nos ganó el partido» se resumen las felicitaciones del técnico Gregg Popovich luego del partido.

«Sin él no hubiésemos ganado. Su pase en la línea de fondo a Danny (Ferry) para el tiro de tres fue tremendo. Robó la pelota tres o cuatro veces. Estuvo fantástico», completó el entrenador y principal responsable de este debut de «Manu» en la NBA junto a los Spurs.

«»Manu» cumplió con clase y profesionalidad todo lo que se le pidió en la cancha y fue de verdad una auténtica inyección de ánimo para el equipo al aportar una nueva energía con sus acciones y actitud», completó Popovich.

Otro de los que no ahorró elogios sobre su actuación fue nada menos que David Robinson: «Necesitábamos un golpe de efecto, alguien que nos diese nueva vida y «Manu» lo hizo», dijo el «Almirante». Y agregó: «Su velocidad hizo la diferencia».

El español Pau Pasol, ala pivote de los Memphis Grizzlies, también le tiró flores: «Ginóbili es un gran jugador, lo vi jugar en gran nivel. Si el entrenador le da confianza, será un gran jugador de la NBA. Tiene que trabajar mucho en el ritmo, sin preocuparse por el tiro externo. No debe escuchar lo que se diga de él, sólo concentrarse en su juego. No sé si «Manu» podrá ser el novato del año, es algo muy difícil de lograr. A veces pienso lo que hice y no lo puedo creer», aseguró quien fue elegido como el mejor debutante de la temporada 2001/02.

Voces: «En la cancha me olvidé de todo»

Luego de la victoria sobre el último campeón, en la cual «Manu» demostró tener «pasta» para jugar en la NBA, el bahiense realizó las siguientes declaraciones:

«Estoy contento. Jugué un poco más de lo esperado, sobretodo a lo último. Se ganó en la cancha del campeón, así que estoy muy contento. Lo demás es todo secundario», comentó.

Los nervios antes de su debut, y jugar en Los Angeles como visitante frente de un «Staples Center» totalmente repleto (18,997 simpatizantes no fueron un escollo para el escolta de la selección argentina.

«Un poco (nervioso) sí. Es natural, me parece. Hasta los que ya tienen experiencia están un poco nerviosos por el hecho de que comienza una nueva temporada. Una vez que entré a la cancha me olvidé un poco de todo, y creo que las cosas me salieron bastante bien. Podía haber jugado un poco mejor, pero creo que ayudé al equipo ganar y ese fue mi objetivo, sobretodo al principio».

Acerca del estado del tobillo que se lesionó en la semifinal del Mundial, afirmó: «Está bien. Me respondió mucho mejor que en todos los entrenamientos y los partidos anteriores, así que estoy muy contento con eso. Ahora la gran prueba es ver cómo reacciona el día después, porque hasta ahora los días posteriores a los partidos fueron terribles. El primer objetivo es ver que no se me hinche ahora y seguir jugando partidos. Será una gran prueba psicológica».

Una de las pruebas más difíciles por las que tuvo que pasar en su debut, fue haber marcado, por momentos, a Kobe Bryant, ídolo máximo de los angelinos y uno de los mejores de la NBA.

«Fue una gran experiencia. No es que tenés adelante a cualquiera. Es uno de los mejores del mundo y un tipo que te puede cambiar el juego. Creo que me fue bastante bien. A nadie le va bien contra Kobe. Ante todo, no quedé en ridículo.»

Festejos de los Kings y Orlando

Sacramento Kings comenzó con un cómodo triunfo sobre los Cleveland Cavaliers por 94-67, con 17 puntos del yugoslavo Peja Stojakovic y 14 de Chris Webber, en otro de los encuentros jugados antenoche.

Los mejores en el equipo de Cleveland, que jugó sin su centro titular, el lituano Zydrunas Ilgauskas, fueron Ricky Davis, con 17 puntos, y Tyrone Hill, con 11 capturas.

Orlando Magic, con el armador Tracy McGrady como figura excluyente, venció a Philadelphia Sixers por 95-88.

McGrady resultó desequilibrante, ya que en los 42 minutos que estuvo en la cancha anotó 31 puntos (11 de 19 en dobles, 2 de 5 en triples y 3 de 5 en tiros libres), tomó cuatro rebotes defensivos, colocó cinco asistencias, tuvo tres pérdidas del balón y cometió tres faltas.

Por el lado de Philadelphia, mientras tanto, su mejores valores fueron los aleros Keith Van Horn y Aaron McKie, ambos con 19 puntos. (Télam)