MNBA, el turno de las vanguardias argentinas

NEUQUEN.- Entre junio y septiembre, una vez concluida la retrospectiva de Raúl Lozza, el Museo Nacional de Bellas Artes de esta capital continuará con el programa de difusión de las vanguardias argentinas. El ciclo comenzará con Norah Borges, hermana del escritor y una de las impulsor as, en las artes plásticas, del ultraísmo al que él adhirió en sus poemas iniciales. Esa muestra será en junio, y al mes siguiente se prevé una retrospectiva de Antonio Berni, que incluirá obras tradicionales y algunas versiones de las ya consagradas, como el caso de la serie de «Juanito Laguna». Entre setiembre y agosto, el MNBA-Neuquén será una de las sedes nacionales de la décimotercera edición del Festival de la Luz, un acontecimiento que reúne a fotógrafos y críticos de arte fotográfico del mundo.

El triple anuncio fue formulado por el secretario de Cultura del municipio y director del MNBA, Oscar Smoljan, quien subrayó el hecho de que, en el caso de Norah Borges, se trata del «primer intento de producir una exposición desde Neuquén para el exterior». En efecto, la muestra, que consistirá en dibujos, pinturas y grabados en linóleo correspondientes a la época ultraísta de la artista y algunos trabajos posteriores –ilustraciones para tapas e interior de libros de autores argentinos y españoles, ver aparte-, se programará en un circuito europeo. Para eso, Smoljan trabajará en conjunto con el ex director del Museo Reina Sofía de Madrid, Juan Manuel Bonet, y con el crítico brasileño Raúl Antelo.

En cuanto a la exposición de Berni, que será en julio, Smoljan dijo que todavía no están seleccionadas las obras, pero se hará una retrospectiva que incluirá nuevas versiones de «Juanito Laguna» con otras ya clásica en el pintor rosarino, como es el caso de la «Orquesta de tango».

Entre el dos de agosto y el 30 de setiembre, el museo coincidirá con la sede central en Buenos Aires y otras salas de esa ciudad –Palais de Glace, Arte Moderno y los centros culturales San Martín, Sarmiento y Recoleta-, donde se hará el Festival de la Luz. Según los organizadores, «será un evento auténticamente federal: abarcará también museos, centros culturales, galerías y espacios de arte de Ushuaia a La Quiaca».

Se programaron 262 exposiciones de las que participarán más de 700 fotógrafos nacionales y extranjeros seleccionados a partir de la premisa «Anónimo. Sinónimo. Antónimo». En la convocatoria se subrayó la exclusividad «para la fotografía artística. Por esto, no habrá trabajos relacionados con la publicidad, y sólo unos pocos relacionados con el fotoperiodismo». Entre los expositores seleccionados, figura Verónica Roig, que se desempeña en la sección fotografía de este diario y es editora gráfica de varios suplementos, entre ellos Estilo Hogar, EH!

Además de las muestras, habrá una serie de conferencias, debates y charlas dictadas por prestigiosos curadores, que se desarrollarán del 7 al 25 de agosto, e incluirán las subsedes del interior del país. Se destacan en el programa «El objeto y la mirada», del fotógrafo español Chema Madoz; «Fotografía y arte» del argentino Eduardo Gil; y «El retrato en el fotoperiodismo», del francés Renaud Montfourny.

Una ultraísta argentina

NEUQUEN (AN).- Cuando Norah y Jorge Luis Borges eran apenas unos adolescentes, viajaron a Europa para continuar con su formación intelectual y artística. El escritor seguía cursos de filosofía en Francia; su hermana era aprendiz en talleres de pintores y escultores.

Ambos estaban vinculados con las principales vanguardias europeas: él directamente con el ultraísmo, una escuela nacida en España al calor de las polémicas suscitadas en Francia y Bélgica por el dadaísmo y el surrealismo. Norah –que, nacida con el nombre de Leonor Fanny fue rebautizada así por su hermano- venía del expresionismo alemán, pero recaló en el ultraísmo y un estilo que los críticos denominaron «naïf».

Al contrario de su hermano, Norah mantuvo siempre un perfil muy bajo. No obstante, fue la que diseñó la portada y el grabado principal de la revista mural «Prisma», que concentró a los principales artistas porteños de la década de 1920. También colaboró con la creación de «Proa» e ilustró libros –tapa e interior- de varios poetas: Rafael Alberti; Juan Ramón Jiménez y Federico García Lorca, cuyo «Romancero Gitano» tenía dibujos de Norah en el estilo del poeta andaluz.

También colaboró con la edición de libros de Silvina Ocampo y del marido de ésta, Adolfo Bioy Casares y con la revista «Martín Fierro». Nació en 1901 y murió en 1998, en Buenos Aires.