Encontró una «garra de dinosaurio» en el jardín de su casa en Gales y dejó perplejos a los investigadores
El hallazgo fue realizado por una mujer de 36 años, quien rápidamente consultó a un zoológico y un veterinario para saber la procedencia de la extremidad. Pero nadie puede determinarlo.
Los vecinos de la comunidad también largaron sus teorías al respecto.
Una mujer de Gales quedó en estado de shock luego haberse topado con una misteriosa sorpresa en el jardín de su casa. Según la propia descubridora, lo que halló sería “una garra de dinosaurio” que había sido mutilada.
Laura Moorcroft, de 36 años, fue la responsable del particular hallazgo que movilizó a un grupo de investigadores para tratar de comprender qué fue lo que esta mujer y su esposo encontraron en el condado de Flintshire, en Reino Unido.
“Acabábamos de regresar de una caminata y mi marido notó algo en el césped”, comentó en diálogo con el periódico The Mirror.
Y en la misma línea, la mujer añadió: «Nos parece que es algo prehistórico. Porque es una garra escamosa parecida a la de un lagarto. Somos grandes admiradores deJurassic Park, así que instantáneamente pensamos que era de un dinosaurio”.
Ante las dudas, Moorcroft decidió ir en busca de una opinión más calificada, por lo que se acercó al zoológico de Chester (Inglaterra) y a un veterinario. Al principio, los dos especialistas afirmaron que la garra era de un pájaro, pero ni siquiera ellos pudieron ponerse de acuerdo sobre la especie.
El misterio alrededor de la pieza encontrada creció. “Uno dijo que era como un faisán y el otro un pavo, así que todavía no sabemos nada”, continuó Laura.
Pero inmediatamente surgieron un par de dudas: “Y si proviene de aves de corral o de algún tipo de ave de caza, ¿qué pasó con el resto del animal? y ¿cómo terminó la garra en ese lugar?”, se interrogó la mujer.
«Una garra de dinosaurio» en Harvard
Al hacer público el descubrimiento en las redes sociales, Laura hizo que los lugareños comenzaran a lanzar teorías. Algunos dijeron que era de un ave, pero otros sospechaban de un reptil tipo un caimán, un cocodrilo o una tortuga.
Más de una persona notó el parecido con un velociraptor, y algunos incluso bromearon que era del monstruo de la película visto en Gremlins de 1984. Representación de un artista de un Velociraptor mongoliensis.
Las aves modernas descienden de los terópodos, un grupo que incluye rapaces y el Tyrannosaurus rex, según Scientific American.
Arkhat Abzhanov, biólogo de la Universidad de Harvard, dijo a The Mirror: «Las primeras aves eran casi idénticas al embrión tardío de los Velociraptors». A diferencia de su contraparte de la película, los Velociraptors reales también tenían plumas y el mismo tamaño que los pavos.
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