Paraguay: la victoria débil de Abdo lo obliga a negociar con la oposición

El conservador Mario Abdo Benítez, hijo del secretario privado del dictador Alfredo Stroessner, ganó por estrecho margen la presidencia de Paraguay. Deberá definir soluciones estructurales para los problemas de fondo que sufre el país desde el siglo pasado: pobreza, precariedad de servicios públicos, informalidad y terminar con la impunidad y la corrupción de los funcionarios.

Su elección fue saludada por el departamento de Estado de EE.UU, país en el que estudió y también por el presidente argentino Mauricio Macri (Ver aparte)

“Marito”, como se le conoce popularmente, ganó por 3,7 puntos al liberal Efraín Alegre, quien postuló por la Alianza Ganar de centroizquierda.

El resultado es muy inferior a la proyección de las encuestas, que llegaron a darle hasta 20 puntos de ventaja.

Se espera que tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados no haya mayorías.

Por eso, los analistas coinciden en que Abdo tendrá que negociar con la oposición y mantener una gestión moderada cuando asuma la presidencia el próximo 15 de agosto. Su primer desafío será el combate de la pobreza.

Paraguay muestra buenos resultados en los índices macroeconómicos, con un crecimiento promedio de 4% anual desde hace más de una década, apoyado fundamentalmente en las exportaciones agrícolas.

Sin embargo, el saliente presidente Horacio Cartes reconoció que deja una “deuda social”.

“En Paraguay falta todo por hacer. Tenemos deudas sociales. No se concibe que con toda la riqueza que tenemos y siendo siete millones de habitantes tengamos la pobreza que tenemos”, dijo.

Marito estudió en EE.UU., fue Subteniente de Reserva de Aviación de las Fuerzas Armadas y heredó una enorme fortuna de su padre, Mario Abdo Benítez.

Ahora se prepara para liderar la vuelta al poder del ala más política del Partido Colorado, ese movimiento heterogéneo que gobernó al país desde 1947 hasta 2008, cuando el obispo Fernando Lugo marcó un incompleto paréntesis de 4 años y medio, hasta que volvieron los políticos tradicionales.

Un pasado que

lo obliga a aclarar

Sus orígenes: el presidente electo , Mario Abdo, insiste en cada entrevista que él no es Alfredo Stroessner. Es decir: que su prontuario por ser hijo del secretario privado del gobernante de facto por 35 años de Paraguay no es culpa suya ni debe servir para condenarlo.

Régimen militar: Abdo mejor conocido como Marito, atribuye algunos logros al régimen militar stronista en materia de seguridad y economía.

En contra del aborto y del matrimonio homosexual. Se declara defensor de los menos favorecidos.

Llamé al presidente electo de Paraguay, para felicitarlo. Espero que podamos trabajemos juntos por el bienestar de nuestros pueblos”.

Mensaje del presidente argentino Mauricio Macri para Mario Abdo.