Negocian para evitar la parálisis estatal

WASHINGTON.- Los aliados demócratas del presidente Barack Obama y sus adversarios republicanos, enfrascados en una disputa interminable sobre el presupuesto 2011, tienen hasta el viernes para llegar a un acuerdo, sin el cual, parte de los servicios gubernamentales deberá cerrar. Pese a intensas negociaciones realizadas la semana pasada, los republicanos, mayoritarios en la cámara baja, siguen sin entenderse con los demócratas, que dominan el Senado. Obama invitó a miembros de los dos partidos que integran el Congreso estadounidense a una reunión el martes en la Casa Blanca para buscar un acuerdo. “El presidente fue claro: todos entendemos la necesidad de cortar los gastos”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney en conferencia de prensa. En la reunión de hoy, Obama “exhortará a los dirigentes a llegar a un acuerdo definitivo y a evitar una parálisis gubernamental que sería perjudicial para nuestra recuperación económica”, agregó. (AFP)