Neuquén tiene la red de bicisendas más extensa, pero pocos la usan

Son 12 kilómetros que conectan el este con el oeste. Sin embargo, solo un mínimo porcentaje de neuquinos la utiliza para trasladarse. Piden más iluminación y nuevos recorridos.

En Neuquén capital hay 12 kilómetros de bicisenda asfaltada y señalizada. Cruza de este a oeste la ciudad para que los ciclistas puedan pedalear como hobby o para movilizarse diariamente. Sin embargo todavía son pocos los que se suman a esta opción. Se estima que por semana laboral (lunes-viernes) se realizan 549.651 viajes y los números son sorprendentes: un 56% usa el auto, el 22% colectivo, un 6% moto, 5% taxi, 5% a pie, 4% en bici y el 2% el tren Neuquén-Cipolletti.

Los datos surgen de una encuesta realizada por el estudio de Big Data que ordenó el municipio en 2017.

La traducción del análisis implica que de cada 100 personas que se mueven en la capital neuquina sólo cuatro se transportan en bicicleta. Si bien no hay datos que distingan entre mujeres y hombres, “Río Negro” entrevistó a cuatro usuarios recurrentes para conocer su visión sobre esta opción de movilidad urbana.

Sea un día de frío, calor, con viento o lluvia, los que quieren llegar al trabajo en bicicleta, aseguraron que las condiciones son aptas para transitar. A excepción de algunas zonas que consideran “inseguras” por la falta de iluminación, porque las bicisendas son estrechas o porque hay tramos interrumpidos por otras obras.

Los primeros trazos de la red de carriles exclusivos para ciclistas comenzaron a dibujarse hace cuatro años por la línea del Parque Central. El recorrido unió el puente carretero con la Estación Terminal de Ómnibus de Neuquén. Posteriormente se extendió hacia el oeste. Y un nuevo trazado se inició en Novella y Necochea, donde atravesó la avenida del Trabajador y bajó por Moritán para conectar con 12 de Septiembre.

Las personas que utilizan la bicicleta para trasladarse hacia sus lugares de trabajos coinciden en que lo hacen para ahorrar dinero, manejar los tiempos libremente y hacer ejercicio.

Alejandra Bazán es enfermera, hace 12 años se vino a vivir a Neuquén, antes estaba en Buenos Aires y se manejaba en bici. “Cuando llegué a la ciudad el trabajo me quedaba a 12 cuadras y decidí moverme en colectivo o a veces caminando”, afirmó. Sin embargo aseguró que hace un año se mudó a 6 kilómetros y como el pasaje de colectivo aumentó, decidió utilizar la bicicleta por dos motivos: porque las condiciones de las bicisendas son óptimas y porque puede administrar sus tiempos libremente, sin depender de la hora que pasa el colectivo.

“Para llegar al trabajo tardo alrededor de 10 minutos por la bicisenda y las 10 cuadras que debo transitar por la calle Godoy hacia el Hospital Heller” dijo Alejandra.

Los usuarios aseguraron que hay muchos espacios para transitar con bici en la ciudad, ya sea por trabajo o recreación. Sin embargo comentaron que hay zonas que no están iluminadas y cuando no hay luz del sol deben tener precaución. “En la zona detrás del barrio Militar es una boca de lobo. Salgo muy temprano al trabajo y de verdad a veces no respiro y paso muy rápido”, contó Alejandra.

Otros afirmaron que la inseguridad es un riesgo que se corre en cualquier lugar, pero que utilizar este tipo de vehículo es una decisión que tomaron para ahorrar dinero y mantenerse en buen estado físico. “Si te roban lo van a hacer en cualquier horario, esté o no iluminado el lugar, pero que haya muchas personas pedaleando por las bicisendas te ayuda a sentirte un poco más seguro”, dijo Lucas Gorrity que trabaja en un comercio del oeste y desde hace dos años usa la bicicleta.

Además comentó que no va al gimnasio y “pedalear 4 kilómetros” todos lo días para ir al trabajo le brindó beneficios para la salud. “Ya no estoy tan agitado como antes, porque fumaba mucho, ahora ya no. No bajé mucho de peso pero me siento mejor y no me molesta levantarme sabiendo que tengo que pedalear varias cuadras” agregó el joven.

Desde el municipio aseguraron que a fines de 2018 iniciarán una obra, a través del programa de Desarrollo de Áreas Metropolitanas del Interior (DAMI), donde la subsecretaría de Planificación Urbana en conjunto con Cipolletti, Plottier y Centenario unirá esas localidades con ciclovías y bicisendas.

“En este último estamos en etapa de proyecto ejecutivo esperando el avance que desarrolla Centenario para traer la bicisenda hacia Neuquén y desde ahí hacer diversas conexiones”, comentó Javier Soto Mellado, encargado del área.

La iniciativa surgió porque la ciclovía que va en paralelo a la Ruta 7 fue interrumpida por las obras del Tercer puente y actualmente “es intransitable” ya que la permanencia de vehículos por el lugar la torna muy peligrosa.

Cicloturismo, una opción barata para cuidar la salud

Cada vez son más las personas que se suman a las salidas al aire libre de cicloturismo. Alejandro Pacchetti (55) organiza y encabeza el grupo Mtb Travesía Neuquén, allí se coordinan destinos para recorrer en bicicleta como a las bardas, Balsa Las Perlas, Allen, Senillosa, Dique Ballester y Villa El Chocón.

Pacchetti decidió utilizar la bicicleta como su medio de transporte principal para llegar al trabajo hace seis años. En su rol de coordinador aseguró que generalmente se reúnen entre 15 y 20 personas para salir tres veces por semana “a pedalear”.

El cicloturismo es una actividad donde participan personas de 15 hasta 65 años. “El rango de edades es variado. Los bikers son cada vez más porque es una actividad que no discrimina por estado físico o por condición económica” dijo Pacchetti .

Otro de los motivos por los cuales las personas son convocadas es porque “cuando se le da continuidad se le toma el ritmo”. Por eso Pacchetti comentó que no es un deporte costoso. “Solo necesitas invertir en una bici al principio y en algún casco por seguridad, de a poco te vas armando del equipo que queres”, dijo.

Las salidas recreativas al aire libre son una manera de hacer deporte desde otra dimensión. Paseando y conociendo los lugares más agrestes de la zona. Según el coordinador, la gente lo elige para no caer en la rutina del gimnasio.

El grupo que coordina Pacchetti se aventura los días de semana laboral unas tres horas y recorren aproximadamente 40 kilómetros. Mientras que los fines de semana se reúnen por la mañana y hacen distancias de 70 o 90 kilómetros, siempre hacia destinos diferentes. Y en época de verano por la noche.

Bicicleteando

En 2018 el municipio de Neuquén implementará un programa para unir con una red de bicisendas y ciclovías la capital con Cipolletti, Plottier y Centenario.

Consejos para salir seguros a la calle en dos ruedas

“El cicloturismo permite conocer los lugares más inhóspitos y naturales de la ciudad en un vehículo considerado amigable para el medio ambiente. Cualquier persona puede hacerlo”.

Alejandro Pacchetti, usuario recurrente de bicicleta y coordinador de cicloturismo en Neuquén.

Datos

4%
de los vecinos que se movilizan de lunes a viernes, desde los barrio al centro, lo hace en bicicleta.
56%
de los neuquinos usa el auto para trasladarse y un 22% lo hace en colectivo.
459.651
viajes se realizan por día, dentro de la semana laboral, desde distintos puntos de la ciudad al centro, según una encuesta del big data.
En 2018 el municipio de Neuquén implementará un programa para unir con una red de bicisendas y ciclovías la capital con Cipolletti, Plottier y Centenario.
La bicicleta no tiene una estructura de contención en caso de caídas, por eso es necesario tener en cuenta algunas normas de seguridad.
El casco es el “principal aliado” según Alejandro Pacchetti quien vio muchas veces a personas que se caen de la bici y por llevar casco no hubo heridas graves.
Para evitar rasparse los guantes y rodilleras son un buen aliado ante una posible caída.
Transitar por las ciclovías habilitadas es la forma más segura de moverse en la ciudad, y si hay que circular por la calle, debe hacerse por la margen derecha.
Por último y no menos importante, utilizar elementos reflectantes y luces permite mejor visibilidad para uno mismo y el entorno. Como así también timbre o bocina para alertar de su presencia.
“El cicloturismo permite conocer los lugares más inhóspitos y naturales de la ciudad en un vehículo considerado amigable para el medio ambiente. Cualquier persona puede hacerlo”.

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