Objetos sexuales y consumidoras

El Observatorio de la Discriminación en Radio y Televisión analizó los dos primeros episodios del programa ¿Quién quiere casarse con mi hijo? de Telefe a fines de agosto. Y concluyó que el programa “reproduce estereotipos de género que descalifican y degradan la imagen de las mujeres”, ubicándolas sólo como objeto de deseo para ser compradas y/o como consumidoras exclusivas de determinados servicios económicos que son ofrecidos por un varón. Señaló que “se fomenta una sexualidad masculina basada en la dominación y en la violencia simbólica”. Alertó que los estereotipos en los medios de comunicación suelen proveer pautas de comprensión acerca de sujetos o grupos transformando algunos prejuicios en “acuerdos sobre la realidad”, perpetuando la desigualdad y la exclusión como problemas individuales que requieren permanente vigilancia y control. Indicó que “las pruebas y los modos a los que se somete a las y los participantes reproducen un mensaje patriarcal que debería ser desterrado en tanto enaltece un único modo de ser mujer en detrimento de las distintas personalidades de las candidatas, desconociendo incluso sus derechos como sujetos integrales y desvalorizando la imagen de los varones”. El informe completo en: http://www.obserdiscriminacion.gov.ar/ web/? p=1371. A las críticas, la conductora Catherine Fulop contestó negando contenidos discriminatorios. En un reportaje con el diario “La Nación” señaló: “(Son) situaciones tomadas de la vida misma. En ningún momento se trata de hacerle nada a la mujer. Son todos libres. Son todos solteros, jóvenes, están todos calientes (risas)”, planteó. “¿Es denigrarse como mujer buscar el amor? Acá se habla de amor. Qué eres capaz de hacer. No lo veo denigrante. Creo que tendríamos que reírnos un poco más. Yo soy una defensora de la mujer”, concluyó.