Piden seguridad para una calle del oeste
Los vecinos del barrio Islas Malvinas reclaman atenuadores de velocidad y semáforos para un tramo de 500 metros de Antártida Argentina. El Municipio analiza medidas para reducir el peligro.
Vecinos del barrio Islas Malvinas reclaman la instalación de medidas de seguridad en la calle Antártida Argentina, una arteria principal que absorbe un gran caudal de tránsito y por la cual los conductores circulan sin respetar las velocidades establecidas. Desde el municipio explicaron que no hay pedidos específicos para la colocación de lomos de burro o semáforos, e indicaron que para realizar este tipo de intervenciones se debe hacer un estudio específico de la calle para determinar cuáles son las fallas de los conductores y las medidas más útiles para corregir el problema.
El reclamo estalló el martes 18 de diciembre cuando un joven alcoholizado que conducía en horas de la madrugada a toda velocidad por Antártida Argentina al 2000, perdió el control y chocó contra tres autos estacionados. La queja inmediata fue la falta de medidas de seguridad en un tramo de 500 metros desde el semáforo que se ubica en la esquina de Catriel y el próximo que está en la intersección de Combate de San Lorenzo.
Adriana, es una vecina del sector y el incidente ocurrió en la puerta de su casa. Uno de los autos golpeados era de su hermana y el rodado terminó muy deteriorado y subido sobre la vereda por la fuerza del impacto.
“Principalmente es a la noche, pero en todos los horarios hay problemas por el tránsito, a la mañana temprano, al mediodía y a la tarde en el horario de salida laboral”, se refirió la mujer. Explicó que “de Catriel a Combate de San Lorenzo, pasan súper rápido, no hay nada de controles, es una locura”, manifestó y agregó que “yo vivo en una planta baja y escucho todo el tiempo los autos pasando. Desde Pringles hasta la comisaría Tercera no hay ni un badén”.
El subsecretario de Planificación Urbana y Proyectos, Javier Soto Mellado, explicó que en el Ejecutivo no han recibido reclamos de este tipo, pero explicó que la colocación de distintos dispositivos para ordenar el tránsito requiere de un trabajo de recopilación de información de las calles, que tiene que ver con el flujo de tránsito y la cantidad de accidentes.
El funcionario señaló que por ejemplo, para la colocación de un lomo de burro se necesita del consenso de los frentistas y explicó que “muchas veces colocamos lomos de burro y después nos llegan las notas de los vecinos porque les molestan las frenadas o las vibraciones cuando pasan colectivos”.
Explicó que “la Antártida Argentina es una calle troncal con colectivos y se tiene que consensuar con la gente de transporte porque muchas veces los colectivos son unidades bajas y pueden tocar.
En Antártida Argentina el tránsito se intensificó aún más por los cortes producidos sobre avenida del Trabajador, a raíz de la construcción del Metrobús. La arteria es utilizada para desviar a los conductores.
A rodar
El secretario de Planificación Urbana, Javier Soto Mellado explicó que para colocar un semáforo en un lugar específico se deben tomar en cuenta tres parámetros.
El primero de los aspectos a tener en cuenta tiene que ver con el flujo y tipo de tránsito que circula por una arteria, si está compuesto de vehículos particulares o también se suman los colectivos. Luego se analiza el índice de siniestralidad y por último se realiza un estudio para determina la conveniencia de colocar semáforos ensamblados a la red semafórica del sector.
Datos
- 110.000
- autos circulan a diario por la capital. Se suman entre 60.000 y 80.000 que ingresan de Plottier, Centenario y Cipolletti.
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