A quemarropa y a pie, así lo mataron al comerciante chino en el oeste de Neuquén
El homicidio de Lin Shan de 46 años, dueño de un autoservicio en el barrio Almafuerte de Neuquén, sigue mostrando señales de un contexto violento. Las primeras imágenes analizadas muestran a un solo tirador con la pistola 9 milímetros.
A quemarropa y a pie, así lo mataron al comerciante chino en el oeste de Neuquén. Foto: Cecilia Maletti
El homicidio de Lin Shan, el ciudadano chino de 46 años que era dueño de un comercio polirubro en el barrio Almafuerte de Neuquén, sigue mostrando señales de un contexto violento. A la información brindada por la autopsia, que da cuenta que recibió cinco disparos, se le suma el dato de que fue solo uno el atacante que empuñó la pistola 9 milímetros.
Información recolectada por Diario RÍO NEGRO muestra que las primeras imágenes analizadas en el perímetro del crimen identifican a un solo hombre como el tirador. Además, se lo ve caminando hasta un costado del auto, con una bolsa donde se presume llevaba el arma de fuego. Desde esa perspectiva, gatilló en reiteradas ocasiones impactando el costado izquierdo del cuerpo de Shan, varios de los tiros salieron por su lado derecho.
La investigación aún no logra determinar si el atacante que huyó del lugar como llegó, a pie, fue asistido por otra persona o un vehículo que pudo aguardar sobre la misma calle Los Loros.
Entrevistas a vecinos y empleados del supermercado se sumaron a la investigación. La esposa de Shan también fue interrogada, para establecer algún tipo de conexión entre el hombre y su fatal desenlace.
Por estas horas se esperan los resultados de dos pericias claves. La primera al vehículo marca Honda donde finalmente murió Shan y la segunda a su celular, para reconstruir las últimas conexiones de la víctima antes de ser atacado. Este último, por medio del Análisis Forense Informático (AFI) podría aportar datos importantes para despejar hipótesis.
Las imágenes que muestran el recorrido del homicida, y las informaciones de las entrevistas siguen siendo analizados sin dejar por fuera detalles. El hecho ocurrió a plena luz del día el martes y a pocos metros de una garita de colectivo, por lo que no se descartan aportes futuros de testigos.
Más temprano, el Ministerio Público Fiscal confirmó que el cuerpo de Shan tenía 11 orificios de balas, todos causados por 5 disparos a quemarropa y corta distancia. Uno de los balazos ingresó por el hombro y causó varias perforaciones en su recorrido.
El comerciante, propietario del supermercado «Long Self» ubicado sobre la calle Lago Viedma, tenía lesiones en la cabeza, el mentón, la zona de la tráquea, cuello y hombro.
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