Hallazgo casual permitió descubrir caso de corrupción de menores y grooming en Bariloche
La investigación comenzó en marzo pasado cuando una persona descubrió de manera casual imágenes de contenido sexual en el celular de una niña y avisó a su abuelo. Hoy, el imputado se declaró culpable en un juicio abreviado y fue condenado a 10 años de prisión.
Los jueces del tribunal condenaron este martes al imputado a 10 años de prisión que comenzó a cumplir en el penal de Bariloche, donde está detenido desde abril pasado. (foto gentileza)
Una persona advirtió de manera casual que en el celular de una niña de 10 años había imágenes de contenido sexual. El hombre era vecino del abuelo materno de la nena y le advirtió sobre la situación. Ese hallazgo derivó en la denuncia correspondiente, que permitió identificar al sospechoso que, pocos días después, fue detenido.
Este martes, la jueza Romina Martini y sus pares Marcos Burgos y Bernardo Campana condenaron a 10 años de prisión al imputado por grooming, por la promoción y facilitación a la corrupción de una niña, agravada por la edad, y abuso sexual con acceso carnal en perjuicio de la víctima. También, lo declararon culpable por suministrar material pornográfico a la nena, agravado por la edad, y por la producción y distribución de imágenes de una niña con fines predominantemente sexuales.
El caso se resolvió en un juicio abreviado que se hizo este martes, a partir de un acuerdo pleno en el cual el imputado, de 62 años, admitió su responsabilidad en todos los hechos delictivos que le atribuyó el fiscal a cargo de la investigación, Martín Govetto. El defensor oficial Marcos Cicciarelo consintió el acuerdo. También, los defensores de Menores que representan los derechos de la niña víctima.
El fiscal relató a los jueces del tribunal que el imputado, cuya identidad se mantuvo en reserva, comenzó en diciembre pasado a vincularse con la niña, porque la madre era su pareja. Govetto informó que en febrero último el acusado perpetró los delitos contra la integridad sexual de la nena de forma digital. Y ese mismo mes, en un espacio de esparcimiento, cometió el abuso sexual con acceso carnal contra la víctima.
Las fuentes judiciales informaron que la investigación se originó a partir de la denuncia que un familiar de la nena presentó a mediados de marzo pasado en la fiscalía. El denunciante se enteró por un vecino que había descubierto en el teléfono de la niña imágenes de contenido sexual y le avisó al abuelo materno.
prueba clave para avanzar con la investigación
Las fuentes dijeron que fue clave que el personal policial secuestrara el celular de la niña, que aportó mucha información a la investigación. Después, sumaron el relato de la nena en Cámara Gesell que lo calificaron de “contundente”. Con esas evidencias, el sospechoso quedó detenido con prisión preventiva.
Las fuentes comentaron que el imputado se aprovechaba de la discapacidad de la madre de la víctima. La mujer estuvo vinculada a la causa y sospechada. Pero la declararon inimputable y la sobreseyeron, a partir de un dictamen de la psiquiatra forense del Poder Judicial Verónica Martínez.
La especialista dijo en el juicio que la mujer era paciente de salud mental, que tenía casi nula comprensión y que el acusado se aprovechó de esa situación para cometer los abusos.
Govetto sostuvo la acusación con el relato de la víctima, el informe de la profesional que la asistió, la denuncia penal de un familiar de la niña, el informe de una integrante del equipo directivo de la escuela a la que asiste la víctima.
También, con el informe de la Senaf, el resultado del protocolo de abuso que se hizo en el hospital Ramón Carrillo, y las pericias de la Oficina de Investigación en Telecomunicaciones (Oitel) sobre los celulares secuestrados y los informes de los profesionales de Informática Forense, entre otras evidencias.
Los jueces consultaron al acusado si comprendía los alcances del acuerdo propuesto por Govetto y si prestaba su consentimiento. El imputado asintió y expresó su conformidad con la pena de 10 años de prisión solicitada por el fiscal.
Martini, Campana y Burgos analizaron el acuerdo presentado por la fiscalía y concluyeron que cumplía los requisitos legales. Por eso, el tribunal lo aceptó de manera unánime y condenó al hombre por todos los delitos que se le atribuyeron. Como la fiscalía, la defensa y defensores de Menores renunciaron a los plazos procesales. En consecuencia, el hombre ya comenzó a cumplir la condena.
Comentarios