Carreras y el pase a planta: “Es lo mismo que le exigimos a los privados”

La gobernadora prefirió no polemizar con Alberto Weretilneck que cuestionó el proyecto. Carreras señaló que JSRN "se caracterizó históricamente por respetar los derechos de los trabajadores".

La gobernadora Arabela Carreras defendió hoy su acuerdo con ATE para promover el pase a planta de 3.100 trabajadores provinciales y le bajó los decibeles a las diferencias sobre ese tema que planteó el candidato a gobernador de su partido Alberto Weretilneck. Carreras dijo que promover la regularización del personal es “la línea histórica de Juntos Somos Río Negro”.

Dio a entender también que los contratados que llevan años en esa situación son en realidad empleados “en negro” y que es indispensable regularizarlos. “El pase a planta es lo mismo que le exigimos a los privados: que tengan en blanco a su personal”, afirmó hoy en Bariloche.

Señaló también que la última palabra la tendrá la Legislatura provincial, que debe evaluar el proyecto. Dijo que lo enviará después de las elecciones, entre mayo y junio, “y allí estará la oportunidad de dar el debate, caso por caso”.

Weretilneck había manifestado a través de las redes sociales su desacuerdo con el pase a planta masivo y dijo que a la provincia le hace falta “un Estado que le sirva a los trabajadores, que sea eficiente y le sirva a la sociedad rionegrina”.

Sobre esas críticas de su jefe político, Carreras intentó mostrarse en dominio de la situación y evitar cualquier escalada del entredicho. Aceptó que “siempre hay que buscar el mejor modelo del Estado y la optimización de los recursos”, pero de inmediato subrayó que JSRN se caracterizó históricamente por respetar los derechos de los trabajadores. “En esa línea me inscribo”, dijo la gobernadora.

Aseguró que gran parte de los empleados que su gobierno propone regularizar son “el personal que trabajó en la pandemia, que fueron aplaudidos por salvar vidas y tratados como héroes”. Dijo que en el listado hay unos 800 entre enfermeras y profesionales de la salud. “El pase a planta es una forma de reconocimiento, les estamos dando lo que les corresponde, que es la estabilidad laboral”, afirmó.

Sobre el resto (hasta llegar a los 3.100 agentes) no dio números, pero dijo que una buena parte son porteros de escuelas y lo justificó en la mayor demanda por reformas e inauguraciones. Señaló que en los últimos tres años su gobierno estrenó 19 nuevos edificios escolares y 9 “grandes ampliaciones”, que significaron la incorporación de unos 25.000 metros cuadrados.

Esa expansión de infraestructura demanda un incremento de personal para la limpieza y mantenimiento, a lo cual se sumaron “los requerimientos extra por la pandemia”, según explicó.

Carreras negó que existan atajos o favoritismos en el ingreso de personal contratado. Ante una consulta puntual de este medio dijo que a la hora de incorporar, en cada caso, el ministerio a cargo le pide una primera autorización para “abrir el concurso”, luego se realiza la selección “en la que suele haber miles de interesados” y por último ella interviene por segunda vez para autorizar cada contrato.

Dijo que ese procedimiento sólo se altera “cuando se busca un perfil muy específico, sobre todo en Salud, donde hacen falta por ejemplo médicos pediatras, y se ha apelado a las contrataciones directas”. Subrayó que fueron “excepciones”.

Señaló que el pase a planta también “favorece el arraigo”, lo cual es importante en el caso de los médicos porque “son muy pocos y hay una competencia muy grande entre provincias” para repartirse la escasa oferta profesional.

Normalizar las diferencias

Carreras sabe que el último reproche público de Weretilneck puede ser leído como un menoscabo de su autoridad, ya que en algunos ámbitos el candidato empezó a recibir trato de futuro gobernador.

La actual mandataria provincial se esforzó en demostrar que mantienen buena sintonía. “Hay partes en las que coincido y partes en las que no -dijo sobre las declaraciones de Weretilneck-. Coincido en que la modernización del Estado tiene que estar en la agenda permanente de todos los gobiernos. Está en la mía y en la del candidato a gobernador”.

Admitió que hay “distintas miradas”, pero aseguró que siempre fue así, a lo largo de su gestión. Dijo que pueden perfectamente pensar distinto y “seguir conversando”.

Aseguró que se siente con respaldo suficiente “para seguir gobernando” y que lo ocurrido (en relación a las discrepancias por el pase a planta) “es lo normal en los ámbitos abiertos y democráticos”.

Carreras dijo que la fuerza política que integra tiene ahora un nuevo perfil, al ampliar su abanico de aliados, y esos matices pueden existir cuando se trata de “construir un espacio con multiplicidad de visiones”. Las calificó como “diferencias saludables” y propuso “estar preparados, porque es algo que va a ocurrir habitualmente”.


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