Mató una vaca Hereford de 150 kilos en Valle Azul y aceptó tres años de prisión en suspenso
El joven de 23 años aceptó la condena que le impusieron y regresará a su provincia de origen donde deberá cumplir una serie de normas de conducta.
La policía encontró el animal y los peritos tomaron muestras para sumar a la investigación. El único detenido reconoció el delito. foto: archivo.
Acorralado por las abundantes pruebas en su contra, un joven de 23 años aceptó el delito por abigeato que se le imputaba por lo que fue condenado a 3 años de prisión en suspenso tras dar muerte a una vaca Hereford en un hecho ocurrido el 19 de abril en la Isla 78, de Valle Azul.
Se trata de Juan Díaz y según el acuerdo homologado por el juez interviniente, en la sentencia se indica que deberá cumplir 3 años de prisión condicional y además deberá fijar y mantener domicilio; presentarse en el Instituto de Presos y Liberados de su provincia de origen, donde se mudará de inmediato; abstenerse de abusar de bebidas alcohólicas y tampoco podrá consumir estupefacientes.
El joven tampoco podrá acercase al establecimiento donde produjo la muerte del animal y tampoco podrá tomar contacto con ninguno de los denunciantes.
Persecución y detención
El hecho ocurrió el 19 de abril cuando efectivos de la Subcomisaría 58 de Valle Azul y de la Brigada Rural lanzaron un operativo ante el llamado de vecinos que denunciaron que un grupo de sujetos había ingresado al establecimiento «Celestino Hermanos» ubicado en inmediaciones a la Ruta Provincial 7.
Allí se encontraron con un grupo de personas que emprendía la huida de la Isla 78 aunque finalmente lograron detener a Juan Diaz quien reside en una provincia del norte del país pero que circunstancialmente se encontraba en la zona.
Los investigadores hallaron muerto al animal «Hereford Pampa Colorado” de unos 150 kilos. También encontraron los restos del cuerpo, como la cabeza y el espinazo de la vaca ya que los sujetos se habían retirado de lugar con la carne y las vísceras, explicó en su momento el fiscal que intervino en el caso.
La calificación legal fue la de “abigeato”, según los Artículos 167 ter, primer párrafo, y 45 del Código Penal.
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