Esta es la flor ideal para el invierno, que llena de color tu hogar y de alegría tu casa
La begonia de invierno es ideal para esta temporada que viene y llenar de color tu casa en este período. Te contamos cómo aprovecharla, con cuidados básicos y algunas precauciones.
Si te gustan las flores y las plantas, el invierno puede ser un momento triste: no muchas de ellas atraviesan vitales esta temporada, reconocida por la propiedad de llevarnos a trabajar lo interno, antes de florecer en primavera. Por eso, la begonia de invierno es una opción ideal para decorar tu hogar. Pero cuidado: no todos los habitantes de casa pueden convivir con ella. Todos los detalles.
¿Cómo cuidar las begonias que florecen en invierno?
La begonia de invierno da un fantástico aspecto decorativo al hogar, adaptándose bien a su cultivo en maceta, lo que hace que muchos fanáticos de las flores la elijan como opción para atravesar una de las temporadas menos fructíferas para quienes gustan de la jardinería.
La temperatura ideal para la supervivencia de las begonias de invierno tiene un amplio rango para su cuidado, pero sobrevive a partir de los 20 grados dentro de casa, en lugares calefaccionados durante esta temporada.
¿Qué condiciones pueden ayudar a la begonia de invierno a prosperar mejor en interiores?
Por su parte, la begonia de invierno prefiere condiciones subtropicales húmedas, demandando riego constante sin encharcamiento, por lo que se recomienda mantener la alta humedad y el suelo uniformemente húmedo, con regado semanal.
En interiores, la begonia de invierno puede instalarse en piedras o humidificadores para replicar su microclima ideal durante su ciclo de crecimiento. Finalmente, a esta planta le gusta el sol parcial, por lo que puede ubicarse en cercanía de ventanas durante el invierno, evitando que los rayos le den de lleno en su floración.
¿Es tóxica la begonia de invierno?: Cuidados a tener en cuenta
Si bien es una planta divina para el hogar, la begonia de invierno resulta tóxica para los humanos, los gatos y los perros. Todas las flores tienen oxalatos de calcio solubles, lo que puede generar síntomas como ardor, vómitos y dificultad para tragar en las personas.
Por su parte, los gatos pueden experimentar irritación oral y en las patas, mientras que los perros registran vómitos y diarrea si la consumen. La atención inmediata es crucial en estos casos, para mitigar los efectos en el corto plazo.
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