Sin rastro del pingüino imperial Happy Feet

“O la emisora se ha estropeado, o algo le ha sucedido a Happy Feet para que no saliera a la superficie”, señala Sirtrack.

La emisora sólo envía datos cuando el pingüino sale a la superficie del océano, lo que no ocurre desde el viernes. En realidad, los pingüinos deben salir a respirar cada par de minutos.

La empresa, especializada en seguir el rastro de animales, no quiso hacer comentarios sobre el posible destino del pingüino. “Esperamos que Happy Feet se encuentre de camino a casa”, añadió.

Happy Feet fue enviado el pasado 4 de septiembre de vuelta a la Antártida desde Nueva Zelanda, a donde llegó tras perder el sentido de la orientación.

Según los datos de Sirtrack, sólo había recorrido 100 de los aproximadamente 2.625 kilómetros que lo separaban de su colonia en la Antártida.

dpa