El conflicto entre vecinos por tala de árboles revivió un viejo pedido al municipio de Neuquén
Vecinas se sentaron a las topadoras para impedir la tala de arboles de más de 50 años. Además, adelantaron que intimarán al municipio de Neuquén para que les entregue el terreno como espacio verde y recreativo.
Conflictos entre vecinos por la tala de álamos en un barrio de Neuquén. Foto: gentileza
Vecinas del barrio Confluencia rural de Neuquén se unieron para frenar a una maquina que buscaba talar los únicos arboles que le dan sombra al barrio. La maquina había sido contratada por otro vecino que tiene un terreno en una zona lindante. Destacan que el sector en disputa es utilizado como espacio verde donde niños y niñas concurren diariamente.
Una vecina del barrio Confluencia, Victoria Bisheimer, en comunicación con RÍO NEGRO comentó la situación con la que se enfrentaron esta mañana, cuando se despertaron con el ruido de unas maquinas que llegaron con la intención de derribar los álamos que dan sombra a un sector del barrio. El sector que entró en disputa, es utilizado como espacio verde por los vecinos y vecinas, y se ubica sobre calle Belisle entre Los Álamos y La Frutilla.
Según lo detallado por Victoria, los árboles tienen más de 50 años, y son «los únicos que brindan sombra a toda la cuadra«. En este sentido explicó que los alamos están en una porción de terreno que está descuidada por el municipio de Neuquén y por el cual ellos, más de una vez, han solicitado que se les entregue como un espacio verde para uso recreativo, pero hasta el momento no han obtenido respuestas.
Este jueves se encontraron con que, otro vecino quería quitar de raíz los arboles del espacio que ellos tanto reclaman y lo intentó hacer aludiendo que tenía un permiso municipal que lo autorizaba a talarlos. «Dijo expresamente que el municipio le había cedido esa porción, por lo que iba a arrasar con todo», comentó Victoria y agregó «nosotros nos impusimos, llamamos a la policía y le pedimos que nos muestre el permiso pero nunca lo hizo«.
A raíz de esto un grupo vecinos se unieron para impedir que los árboles sean talados sentándose con sillas frente para que las maquinas no puedan pasar.
El conflicto barrial terminó con personal policial arribando al lugar y posteriormente el director de la Subsecretaría de Espacios Verdes se encargó de detener por completo el operativo del vecino porque, nunca presentó el permiso que decía tener. Victoria, con la ayuda de otras mujeres aprovecharon la presencia de la autoridad municipal y le informaron sobre el pedido que llevan hace años.
El conjunto de vecinos adelantó intimarán al municipio para que finalmente les de de una respuesta y que el terreno finalmente les sea entregado como espacio verde.
«Nosotros necesitamos que esos arboles sigan en pie, queremos tener un espacio lindo y agradable para disfrutar todos, además hay una ordenanza que dice que nos corresponde un espacio verde pero no se está cumpliendo», concluyó Victoria.
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