Dar a luz en una ambulancia rodeada de nieve: en Pilcaniyeu asistieron un parto durante el traslado

"Empecé en la casa con la contracciones, tipo 4:30 de la madrugada", contó Pamela en diálogo con este medio. "Llamamos a la ambulancia y quedamos en encontrarnos en el camino", contó para comenzar el relato de la aventura que significó el nacimiento de su beba.

La llegada de Oriana al mundo, en plena Región Sur rionegrina, no fue una más. El personal de salud debió asistir a Pamela, su mamá, cuando iban a bordo de la ambulancia rumbo al hospital. Las contracciones no saben de frío ni de caminos intransitables. Y se incrementaron cuando el cuerpo lo necesitaba, aunque eso fuera en medio de la nieve.

A través de su cuenta de Facebook, desde el Hospital de Pilcaniyeu felicitaron al equipo que acudió al pedido de asistencia y que, dada la celeridad del trabajo de parto de la embarazada, se las ingeniaron para recibir a la bebé en el rodado en el que viajaban.

Las imágenes del paisaje afuera de la ambulancia, en plena meseta, hablan del coraje de Pamela y los trabajadores de salud, que pudieron ayudar a Oriana a nacer.

Foto: Hospital de Pilcaniyeu

«Empecé en la casa con la contracciones, tipo 4:30 de la madrugada«, contó Pamela en diálogo con este medio. «Así que nos levantamos, llamamos al hospital y urgente mandaron la ambulancia. Quedamos en encontrarnos en el camino», siguió su relato, sin aclarar el detalle no menor, de que debían salir al camino, en una noche oscura y rodeados de nieve.

«Las contracciones ya venían más seguido», siguió contando, pero como si eso fuera poco, empezaron «a renegar con el auto, que patinaba porque se les cortó una de las cadenas. Así que quedamos parados antes de llegar a Cerro Alto. Ahí nos alcanzó la ambulancia», agregó.

En esas condiciones, dijo que lograron avanzar «unos 20, 25 kilómetros con la ambulancia y ¡páramos! Porque ya las contracciones eran una atrás de la otra, ya quería nacer».

«Una experiencia única en la vida… la verdad que más no puedo pedir, sólo dar gracias a Dios… ¡salió todo más que bien!»,

expresó Pamela.

La joven de 19 años vive actualmente en Piedra del Águila y ya era mamá de otra nena de un año y tres meses. Por estos días se encontraba visitando a sus padres en el paraje Corralito, ya que la fecha prevista de parto era para el 28 de Julio, pero todo se adelantó.

Pamela calcula que unos 80 kilómetros separan la casa de sus padres, en el paraje Corralito, de la zona de Pilcaniyeu. Foto: Captura Google Maps

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