Denuncia de abuso en una escuela primaria de Cipolletti: apartaron al equipo directivo

La coordinadora local del Consejo Provincial de Educación, Silvina Peltzer, confirmó la decisión. Familiares reclamaron este lunes en la puerta del establecimiento.

Este lunes las familias de la escuela primaria 36 ubicada en Ferri se reunieron en las puertas del establecimiento para protestar por una situación de abuso que sufrió una alumna por parte de un compañero. Según describieron desde el Consejo de Educación, la denuncia es del 2022. Este martes confirmaron que se apartó a la directora y a la vice durante la investigación.

La coordinadora local del Consejo Provincial de Educación, Silvina Peltzer, detalló a este medio que «la denuncia, no es de ayer, hay unas exposiciones que hizo la familia con anterioridad y la Supervisión Escolar intervino. Se comenzó la investigación y hubo una serie de irregularidades en la primer denuncia por lo que se apartó al equipo directivo del cargo hasta que finalice la investigación«.

La vocal gubernamental del Consejo Provincial de Educación, Marta Juárez explicó a Diario RÍO NEGRO que «a los se los apartó hace un par de meses atrás».

Según el relato de los padres de la niña durante este lunes, los hechos ocurrieron en mayo y octubre del 2022, pero el viernes pasado hubo otro, lo que generó una preocupación aún mayor. Indicaron que la primera solución que plantearon desde el equipo directivo fue cambiar al alumno de aula.

Juárez detalló que ya se venían realizando trabajos en la institución para tratar la situación: «Se comenzó a intervenir no solo la supervisión sino el equipo técnico y se abordó el grado y luego de manera institucional». Con respecto a las decisiones que se tomaron, aseguró que «lo primero que se decidió fue hacer un reagrupamiento de los estudiantes, se decidió apartarlos para garantizar el derecho de educación«.

Los padres de la escuela 36 de Ferri protestaron por un caso de abuso. Foto: Florencia Salto.

Y contextualizó cómo ocurrió el hecho la semana pasada: «Hasta agosto recibimos por parte del equipo de Supervisión, cómo se venia abordando la situación, el equipo realizaba muchas acciones para abordar con las familias sobre convivencia«. Agregó que se había reorganizado la escuela para el cuidado de los sectores y poder tener un espacio supervisado por los adultos.

«Lamentablemente la semana pasada en una situación de juego hubo una situación entre los dos menores. Hasta la semana pasada, ambos estudiantes estaban en clase con normalidad«, comentó.

Peltzer explicó que «ayer la familia se manifestó en frente del colegio porque están solicitando el alejamiento del alumno de la escuela, junto con otros reclamos». Y argumentó por qué estuvo presente: «Asistí porque el titular de la Supervisión Escolar está de licencia, así que me acerqué para poder interiorizarme de la situación y recibir el planteo de las familias».

Con respecto a la investigación, Peltzer detalló que «se está trabajando con la Supervisión junto con Etap y la dirección de la escuela en el caso».

Además explicó que el estudiante acusado de abuso continuará trabajando con un dispositivo escolar pero no asistirá al establecimiento: «Por el momento lo que se decidió es trabajar con otro dispositivo escolar con el alumno, eso significa con algún trabajo que no sea presencial, por ahora hasta que se logre juntar todas las partes, hasta que se pueda ver qué otra posibilidad hay». Juárez aclaró que «para garantizar el derecho a la educación, le ofrecimos un dispositivo domiciliario hasta que nosotros podamos resolver la situación, le garantizamos el derecho a ambos».


Denuncia de abuso en una escuela de Cipolletti: el reclamo de los familiares


Verónica, la mamá denunciante, comentó este lunes que «la situación ocurre desde mayo del 2022, mi hija me relató lo que pasó. Me acerqué a la escuela ya que ninguna docente me avisó, la solución que dieron fue hacer que el menor recapacite y que iba a ser tratado por el ETAP» (Equipo Técnico de Apoyo Pedagógico).

«Nos reunimos de nuevo, la directora me avisa minutos antes que no podía reunirse y el equipo del ETAP nos informa que las directivas nunca les habían mencionado lo que sucedió. El equipo directivo nunca nos comentó la situación, si mi hija no hablaba yo no me enteraba. Ella se iba llorando de la escuela por las situaciones que sufría», manifestó Verónica.

«Pedimos que lo saquen de la escuela, que lo cambien o que le enseñen en la casa. La escuela no puede más, está desbordada, imaginen que fue un nene de séptimo grado que me aviso que mi hija estaba llorando el viernes pasado», contó.


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