The Beatles: La reinvención de la música

En apenas ocho años The Beatles cambiaron el panorama de la música contemporánea. Diferentes a cada momento, lograron reinventarse hasta el día en que dijeron basta. En el Cultural, una visión de su historia y de sus increíbles metamorfosis estéticas y musicales.

«A diferencia de otros grupos, sobrevivieron siempre a fuerza de reinventarse permanentemente a sí mismos», dijo una vez Richard Lester, director de «Anochecer de un día agitado».

The Beatles estuvieron dispuestos, desde el principio, a ser el grupo correcto en el momento apropiado. Dejaron la pose rockers de sus inicios para adquirir el aspecto del pretendiente ideal de la nena de papá cuando alguien se los sugirió. Este cambio de estilo, asociado a su música pegadiza y poblada de hits, llenó estadios y rompió todos los parámetros de éxito establecidos hasta ese momento por el rock o la balada romántica. Había nacido, de una vez y para siempre, el verdadero poder del pop.

La supuesta rivalidad entre The Beatles y los The Rolling Stones fue un recurso que sirvió a las necesidades de popularidad de ambos conjuntos pero que en definitiva no se condecía con la realidad: The Beatles y The Rolling Stones supieron llevarse muy bien detrás del escenario donde colaboraron en distintas formas. Una ejemplo más de su amplitud de criterio.

Había en The Beatles una especie de ingenuidad, una singular capacidad para desechar los prejuicios que los volvió permeables al cambio. Fue en un restaurante hindú, durante el rodaje de «Help!», que George Harrison vio por primera vez un sitar. Al poco tiempo, y sin que esto fuera un trauma para los destinos del grupo, comenzó a practicar con el instrumento que incorporó en temas de «Rubber Soul» y luego definitivamente en «Revolver».

Música y estética eran para ellos afluentes infinitos y dinámicos de un río sobre el que navegaban siempre a favor. Los pelos duros por los flequillos de niño bien; el aspecto formal-informal de hombres en sus treinta, por unas barbas cultivadas en un hippismo de influencias orientales hacia el final de la banda. Los pub por los estadios para miles de personas histéricas que no les dejaban escucharse a ellos mismos; la tranquilidad del estudio por un último concierto arriba del edificio de su empresa productora (Apple) que terminó luego de increíbles 42 minutos con la intervención de la policía que los detuvo por perturbar el orden. The Beatles son responsables de que no haya nada nuevo bajo el sol. ¿Recuerdan cuando Bono y los suyos hicieron algo parecido en una terraza dos décadas después?

Detalles. Entre los más de 80 personajes que rodean a The Beatles en «Sergeant Pepper´s Lonely Hearts Club Band» figuran seres humanos tan dispares y brillantes como Jung, H.G. Wells, Marilyn Monroe, el Gordo y el Flaco, Bob Dylan y siguen las firman. Sí, Tato Bores también hizo su homenaje a esta portada en su última etapa en televisión. El disco es una muestra acabada del compromiso por la metamorfosis que llevaba el grupo en la sangre.

Detalles. Fotografías que guarda el álbum de la fama. El rostro de esos prometedores jóvenes de cuello y corbata sonriendo para la eternidad. La mirada piratesca protegida por unos extraños trajes victorianos y un tambor donde se lee: «Sergeant Pepper´s Lonely Hearts Club Band». Posando junto a alguna playa del Mediterráneo, en remeras o camisas, según corresponda, así como así, sin que nada ni nadie importe demasiado. Mansos como corderos y ataviados de ropas estridentes junto al gurú Maharishi Mahesh Yoghi. Detrás de unos anteojos negros, excepto Paul McCartney que los tiene levantados -ya sin John Lennon-, uno serio, otro sonriente, otro sorprendido en la última página del especial que 1995 les dedicó la revista «Life». «Just one more», dice el título de la fotografía.

«Lennon parece ser de orientación extremista, aunque no da la impresión de ser un verdadero revolucionario ya que está constantemente bajo la influencia de narcóticos», escribió en un memorandum secreto un agente del FBI en 1972, en un delirante intento por describir, interpretar y racionalizar la vida cotidiana del ex Beatle en Estados Unidos. La idea era entenderlo primero y deportarlo después.

«Si mandáramos a cuatro muñecos de cera con flequillo, la gente se conformaría con eso. Los conciertos de The Beatles se han transformado en una especie de rito tribal que no tiene nada que ver con la música», aseguró Lennon antes de iniciar la última gira de la banda. Su decisión de abandonar las presentaciones en vivo abonaron mejor el imaginario colectivo. Entonces The Beatles ya habían trascendido los típicos engranajes de la popularidad. Iban camino de convertirse en una religión.

Desde su separación, The Beatles han ganado en fanáticos o adeptos que andan tanto detrás de su música como de las migajas –como aquella tostada de Ringo- que fueron dejando a lo largo de su existencia. The Beatles son la energía alrededor de la cual se ha tejido una de las más increíbles telarañas de fetichismo moderno. La tecnología y el dinero han permitido que la cosa llegue a un grado de estupidez que minimiza cualquier otro fenómeno de idolatría. Tal vez con excepción de Diego Maradona, que bien podría ser más famoso que The Beatles.

Tiempo atrás Charly recordó que su sello de identidad por estos años, la frase «Say no more», viene de una escena del filme «Help», en donde una camarera hindú les repite muchas veces que no les puede decir nada más. Lo dicho, nada bajo el sol.

El deseo constante de interrelacionar artes, culturas, ritmos, timbres, variables estéticas y compositivas, que se evidenció sobre todo en los discos más maduros de The Beatles, siguió concretándose en la obra de cada uno después de su ruptura. Sin temor y sin pudor.

Uno de los más logrados homenajes que se le han hecho a la banda, provino de Rita Lee. El recientemente editado «Bossa`n Beatle», reúne algunos de sus clásicos y les imprime texturas e intensidades propias de la música del Brasil. Una suma teológica donde se rompen los esquemas a partir de la íntima relación entre la cadencia erótica del bossa nova y el filoso quejido de una guitarra eléctrica. Música para no perder la fe, hermano.

Claudio Andrade

La leyenda en una exposición

Buenos Aires (Télam).- La mítica historia de Los Beatles, la banda pop de los cuatro músicos de Liverpool que en apenas 8 años de existencia revolucionó la escena musical y social de Occidente, es el motivo de una exposición que se inauguró hace unos días en La Rural.

Los Beatles Exhibition en La Rural, tal el nombre de la muestra, fue organizada por el coleccionista Raúl Blisniuk -distinguido por el libro de los récords Guinnes en 1998 como el mayor coleccionista de objetos de Los Beatles en América Latina- y cuenta con el auspicio de las Secretarías de Cultura y de Turismo y Deporte de la Nación y del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Fotos autografiadas por Paul, John, George y Ringo en la tapa de «El Album Blanco», cartas de Paul y de George a sus fans en 1968, una remera usada por John, un bajo autografiado de Paul, son algunos de los más de mil objetos que estarán presentes en la muestra, a lo largo de los 2.800 metros cuadrados del salón Frers de La Rural. La exposición coincide con el 40 aniversario de la aparición del primer single de los Beatles («Love me do» y «I Love you») el 5 de octubre de 1962, grabado en los estudios EMI de Londres el 11 de setiembre de ese año, luego de que los cuatro jóvenes de Liverpool hubieran hecho su experiencia en un bar de marineros de Hamburgo y de que se convirtieran en un suceso del bar The Cavern en su ciudad natal y de que fueran contactados por el agente Brian Epstein, de fuerte influencia en los sellos discográficos británicos, quien los relacionó con el productor George Martin.

La muestra estará dividida en tres espacios: uno dedicado al aspecto museológico, en el que se podrá seguir la historia del grupo año por año con la edición de todos sus discos y que abarca una historia exhaustiva y completa de la banda.

Otro aspecto de la megaexposición contendrá pinturas dedicadas a Los Beatles realizadas por distintos artistas plásticos argentinos como Luis Felipe Noé, Pérez Celis, Antonio Seguí, Rogelio Polesello, Carlos Gorriarena, Marta Minujin, Carlos Ferreyra, Nicolás García Uriburu y Ricardo Carpani, entre otros.

Y, finalmente, un tercer nivel del evento contará con la participación de músicos argentinos que tocarán en vivo temas del grupo de Liverpool todos los fines de semana, dentro de los que ya se encuentran confirmados César «Banana» Pueyrredón y Lito Vitale.

Al mismo tiempo, en una sala especialmente diseñada se proyectarán distintos documentos fílmicos de Los Beatles, que van desde recitales, como el ofrecido en el Shea Stadium de Nueva York el 23 de agosto de 1962, hasta reportajes y apariciones televisivas.

Discos de oro, cartas manuscritas, instrumentos del grupo, dibujos originales de Lennon, comics, autógrafos y una importante recopilación de fotografías inéditas, portadas de discos y curiosidades, serán algunos de los objetos presentes.

La canción no superada

Buenos Aires (Télam).- En menos de ocho años, los que transcurrieron desde la aparición de su primer single en octubre de 1962 hasta el anuncio oficial de su separación, el 10 de abril de 1970, Los Beatles fueron un torbellino que modificó sustancialmente el mapa no sólo musicial sino también cultural de Occidente.

El cuarteto de Liverpool conformado por John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr estalló literalmente como uno de los fenómenos de la década del «60, inscripto en una serie de transformaciones sociales, como la psicodelia, el antibelicismo, el borramiento de las fronteras culturales y la cultura juvenil.

En ese lapso, los cuatro jóvenes de Liverpool editaron trece long plays, carrera iniciada en 1962 con «Please, please, me» y concluida en 1970 con «Let It Be»; filmaron cuatro películas y realizaron cientos de shows a lo largo del mundo, desatando una verdadera fiebre conocida como «la beatlemanía».

En el panorama musical fueron no sólo el principal y más potente grupo de la escena pop, a la que le dio el alcance planetario que hoy tiene, sino que también dejaron sentadas las bases que distintos grupos irían desarrollando con los años en un amplio abanico que abarcó desde el punk (Helter Skelter) hasta el rock sinfónico.

Desde aquella pegadiza, fresca, simple y amable tonada de «Love me do» hasta la actualidad, Los Beatles, de los cuales han muerto dos de sus integrantes -John Lennon, asesinado en Nueva York, y George Harrison de cáncer-, no han dejado de influir y marcar la vida de estos tiempos y, como dijo el músico argentino Charly García, «hasta ahora, su concepto de canción no fue superado».


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios