Un ex convicto respaldó la teoría de Temis

NEUQUEN (AN).- Con el testimonio de un ex convicto defendido por Temis culminó ayer el proceso testimonial que desde el lunes se llevó adelante en esta ciudad en el marco del jurado de enjuiciamiento contra el defensor federal de Neuquén, Oscar Alberto Temis, acusado de manosear a varios de sus defendidos. El ex presidiario respaldó el argumento central de la defensa y sostuvo que «Temis defendió a presos que el Servicio Penitenciario Federal no quería».

A partir del próximo jueves 24 continuará en la sede del tribunal de enjuiciamiento de la ciudad de Buenos Aires, la primera causa que el organismo creado con la reforma constitucional de 1994 encara contra un defensor oficial. En ese momento se tomará declaración a una testigo oriunda de Cutral Co, quien ayer no pudo prestar declaración por problemas de salud.

La cuarta y última jornada de actuaciones en esta ciudad culminó ayer con el testimonio de tres testigos convocados por la defensa: Alonso Carrasco, un presidiario alojado en la Unidad Penitencia 9; el dirigente sindical de los empleados judiciales Jorge Izquierdo y Humberto Fraile González un ex convicto defendido por Temis.

La declaración de Fraile González fue central ya que el ex presidiario relató las presiones y premios que vivirían los reclusos de las unidades penitenciarias locales por parte del personal del Servicio Penitenciario Federal y advirtió que «Temis no reparó en eso y defendió a presos que desde el servicio no se querían».

El testimonio de Fraile González respalda el eje central de la defensa de Temis quien acusó a algunos «agentes del Servicio Penitenciario de haber orquestado una maniobra para intentar perjudicarlo».

El Jurado de Enjuiciamiento por la destitución de Temis se originó el 10 de agosto de 2006 en una denuncia presentada ante la Defensoría General de la Nación por nueve empleados del Juzgado Federal 2 de esta ciudad, espacio donde Temis se desempeñaba como defensor público. La presentación derivó en una investigación encarada por la Defensora General de la Nación, Stella Maris Martínez, y en la suspensión del defensor en diciembre.

Temis está acusado de haber hecho desnudar en su despacho y de haber manoseado a varios jóvenes a los que asistía en causas por tenencia de drogas para el consumo personal.

Desde el lunes, ocho de sus defendidos, de entre 18 y 25 años, aseguraron que en entrevistas mantenidas a solas entre

2002 y 2005 los había presionado para que se sacaran la ropa con el pretexto de verificar si seguían drogándose. Los jóvenes oriundos de esta ciudad relataron afligidos lo ocurrido y en dos casos incluso lloraron.

No obstante, el miércoles, el capellán de la Unidad Penitenciaria 9, Juan Francisco Flynn, reivindicó las actuaciones realizadas por Temis en defensa de condenados y procesados detenidos en el penal.

En la acusación de la Defensora General se argumentó que el comportamiento de Temis perjudicó el derecho de defensa de los jóvenes y lesionó «los principios elementales de prudencia, discreción, transparencia y eficiencia en el ejercicio de la acción penal pública». Además, la causa cuenta con un segundo cargo en el que acusa al defensor de haber obligado a que uno de sus defendidos cortara el pasto de la defensoría en cumplimiento de una tarea comunitaria que nunca le había sido asignada.