Un grafiti antihippies, ¡qué mal!

Eso se llama derecho de admisión. Pero, ¿será de la época de los setenta? ¿O alguno se quedó varado en el tiempo? ¿Grafitis para excluir a toda la generación beat, con Allen Ginsberg, Kerouac, Joan Báez y todos los demás?

¿Es un hippie el que usa camisas con flores, pantalones oxford; las mujeres minifalda y los hombres el pelo largo, barba y con la guitarra al hombro?

La cultura hippie cambió de alguna forma el mundo con su rebeldía y el enaltecimiento de su palabra emblema: paz.

Protesto, protesto, no quiero más exclusiones.

Basta, por favor.

Jorge Castañeda

DNI 8.569.045

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