Que la plaza vuelva a ser de todos

En la historia de la democracia siempre el espacio público fue muy importante. Los antiguos griegos se reunían en un lugar abierto y público a discutir y resolver sus políticas: el Ágora. En la democracia moderna, dice Petrella, esos espacios públicos son las calles, las plazas, los estadios. En ellos deberían poder expresarse en forma correcta y libre todas las ideas de los ciudadanos.

Son espacios plurales que nos pertenecen a todos, donde la sociedad se expresa, pasea, se divierte. Cuando una parte de ésta se apropia de un espacio en la ciudad se lo está quitando a otro, está diciéndole al mundo que los que habitan ese sitio dejaron de ser plurales y el lugar también.

Esa plaza que nos pertenece a todos, de izquierda, derecha, centro, etc., sólo puede ser usada y expresar la posición de un sector limitado de la sociedad. Esto es totalitarismo.

Todas estas son sensaciones que me genera el acampe en El Bolsón. Un grupo busca imponer su voluntad, sin ningún temor a mentir, a difamar, a bastardear todos los valores, con tal de hacer lo que ellos y sólo ellos consideran justo, sin importarles ninguna otra opinión. Y como no pueden enfrentar estas opiniones y hechos, sólo se dedican a la difamación.

Con sus marchas, mentiras y ocupaciones buscan presionar a los jueces para que no puedan actuar como corresponde: libres y de acuerdo a su conciencia y a la justicia, no atados a las presiones y al oportunismo de algunos políticos, que al igual que las chicas mediáticas de la TV lo único que buscan es un segundo de pantalla aunque sea a través del escándalo, así pueden garantizarse cuatro años más en una banca (y un sueldo).

Se disfrazan para marchar de titiriteros, artistas, ecologistas, plurales; pero cuando alguien quiere expresar una idea diferente lo atacan gritan y le impiden la expresión, como ocurrió en la audiencia pública.

Se disfrazan de plurales y mansos pero son totalitarios y violentos. Se escudan tras argumentos ambientales, pero son oportunistas que aprovechan los huecos del sistema para vivir a costa de los que pagamos impuestos y mantenemos las escuelas, los hospitales… el Estado.

Espero que los mecanismos de la democracia y el diálogo se impongan sobre la barricada del totalitarismo y la violencia.

Y que la plaza vuelva a ser plaza.

José Luis Calviño Andion

DNI 13.537.561

Pte. del Endipem

“Con sus marchas, mentiras y ocupaciones buscan presionar a los jueces para que no puedan actuar como corresponde: libres y de acuerdo a su conciencia y a la justicia, no atados a las presiones”.

José Luis Calviño Andion

DNI 13.537.561

Pte. del Endipem