Familia zapalina lucha por los derechos de su hijo autista

Una obra social dejó de pagarle a los especialistas que atendían al niño de nueve años. Fueron a la Justicia y les dio la razón, pero sigue la falta de respuestas.

Una familia de esta ciudad pelea por los derechos de su hijo contra la falta de sensibilidad de una obra social. Son los padres de un chico con autismo que no está recibiendo sus terapias debido a que Accord Salud se niega a pagarle a los prestadores desde hace más de un año.

El nene dejó de progresar en su tratamiento y ya presenta síntoma de atraso producto de la ausencia de una estimulación adecuada. Lo más curioso es que la obra social ni siquiera dio respuestas luego de un fallo del Juzgado Federal de Zapala que, además de imponerle una multa por cada día de incumplimiento, le ordenaba hacer frente a sus obligaciones.

“La realidad es que nos sentimos desolados frente a esta realidad. Esta obra social nunca le pagó a las terapeutas de mi hijo Benjamín y ni siquiera mostraron un mínimo de interés en nuestro reclamo”, explicó Pablo Szienkierman.

La pesadilla para estos padres comenzó el año pasado. Benjamín, que cumplió 9 años hace pocos días, tiene un diagnóstico de autismo y comenzó a asistir a sus terapias de Psicología, Fonoaudiología y Terapia Ocupacional. Además cursó segundo grado en una escuela primaria de la ciudad.

“Accord Salud firmó un acuerdo particular con cada prestador pero nunca les pagó. Sobre fin de año y luego de haber reclamado en diferentes oportunidades, las profesionales decidieron con absoluta razón suspender las terapias por no haber cobrado un solo mes”, sostuvo el papá.

Allí comenzó el peregrinaje de la familia que presentó un recurso de amparo ante el Juzgado Federal que se resolvió favorablemente. La empresa nunca se hizo cargo del perjuicio causado y hace pocos días cuando ni siquiera envió un representante a la audiencia de conciliación.

En este escenario, la jueza Silvina Domínguez resolvió aplicar una multa por cada día de incumplimiento y ordenó que la obra social cumpla su obligación. De todas formas hasta ahora no hubo respuestas.

“Lo grave es que Benjamín está padeciendo por no poder concurrir a sus terapias. Vemos que está perdiendo todos los avances que había tenido el año pasado y es una situación que nos desespera”, indicó el padre.

El costo estimado para el tratamiento que está recibiendo el nene es de unos 15.000 pesos mensuales. La familia ya viene afrontando con recursos propios el pago de una acompañante terapéutica que la obra social se había negado a aceptar.

Ahora los padres están impulsando una denuncia por abandono de persona y desobediencia a una orden judicial con la esperanza de lograr el tratamiento que su hijo necesita para insertarse en la sociedad.

“Lo grave es que Benjamín está padeciendo por no poder concurrir a sus terapias. Vemos que está perdiendo todos los avances”.

Pablo Szienkierman, padre de Benjamín.

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“Lo grave es que Benjamín está padeciendo por no poder concurrir a sus terapias. Vemos que está perdiendo todos los avances”.

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