Un chiquito murió en Allen tras caer a una acequia

ALLEN (AA).- Un niño de un año y diez meses de edad, hijo de inmigrantes bolivianos que trabajan en los hornos de ladrillos de la Colonia 12 de Octubre, perdió la vida luego de que ayer en la mañana cayera una acequia con agua. El menor fue asistido en la guardia del hospital pero ingresó sin signos vitales y los esfuerzos que realizaron los médicos para reanimarlo fueron en vano. El hecho sucedió poco después de las 9 en un campamento ladrillero de la Colonia 12 de Octubre, lugar en el que reside y trabaja una pareja de obreros bolivianos. Ante un descuido de los adultos, uno de los hijos del matrimonio llegó hasta una acequia y cayó al agua. Alrededor de las 9:30 los padres del niño arribaron a la guardia del hospital local con el chiquito en brazos para que reciba asistencia médica. Pese a que el pequeño ya no presentaba signos vitales, los médicos de la guardia le practicaron diferentes maniobras de reanimación que – lamentablemente – no dieron resultados. En los últimos años, por la peligrosidad del sector, la falta de medidas de seguridad, de un espacio de recreación para los más pequeños y por el descuido de los adultos, una decena de niños murieron aplastados por tractores, se electrocutaron, sufrieron quemaduras por incendios que se desencadenaron a causa de precarias instalaciones o se ahogaron. En marzo de este año un niño que se encontraba solo dentro de una precaria pieza, en uno de los hornos de la Colonia 12 de Octubre, sufrió quemaduras en el 85% del cuerpo luego de que un cortocircuito desencadenara las llamas que lo sorprendieron durmiendo. El pequeño estuvo al borde de la muerte pero gracias a un esfuerzo coordinado de médicos del sector privado, de Salud Pública de Río Negro y del hospital Garrahan, se pudo salvar su vida.