Los pescadores buscan alternativas

SAN ANTONIO OESTE (ASA).- Empleados de Camaronera Patagónica y funcionarios provinciales acordaron pautas para enfrentar la crisis. Cerca de las 23 del sábado, los marineros y empleados de planta de la empresa dejaron la banquina de la ruta 251, donde permanecían luego de haberla cortado durante 16 horas hasta que fueron intimados por la Policía.

Hoy se prevé una reunión en-tre la comisión de empleados, conformada recientemente tras la debacle final de firma pesquera, con el secretario de la Producción Marcelo Santos u otro alto funcionario provincial para bus-car vías de solución definitiva a la grave crisis económica y labo-ral que atraviesan estos obreros.

Los funcionarios se comprometieron a que el Estado rionegrino ejecutará las deudas que mantiene la firma por conceptos de multas impagas, establecidas al haber incurrido en reiteradas infracciones a la legislación pesquera vigente, que prohíbe transportar pescado fuera de la provincia sin procesar y pescar en determinadas épocas del año en precisos puntos del golfo.

También Río Negro reclamará las tasas extractivas impagas que corresponden al 1 % del valor de las capturas producidas por la empresa. Según se manifestó en la reunión, ese total ascendería a unos 30 mil pesos.

En Viedma continuará el diálogo con el subsecretario de Trabajo, quien buscará los mecanismos legales para el pago del seguro de desempleo y otros beneficios que les correspondan a los trabajadores.

En tanto, como dato más destacado para la continuidad de la actividad laboral de las 250 personas que se desempeñaban en los barcos, la planta, la flota de camiones y en el muelle de Camaronera Patagónica, la alternativa más firme a la que se comprometieron los funcionarios provinciales radica en aportar la logística necesaria para que los propios tripulantes se trasladen a Mar del Plata o alguna otra localidad marítima en busca de dos barcos que puedan operar en el golfo.

Las capturas podrían ser procesadas en la Terminal Pesquera Artesanal y la pesca continuaría dando empleo a estos trabajadores que desde hace ocho meses atraviesan por un estado de profunda incertidumbre y carencias económicas.

«Ahora lo más importante es conseguir los barcos, después veremos la forma jurídica para que operen en el golfo. Es decir, si tienen que ser arrendados por alguna de las otras empresas locales o si los trabajan los propios obreros en el marco de una cooperativa», expresó el legislador Javier Iud.