Lo imputaron por matar a un poblador en un paraje de Río Negro, pero está libre: marcharon pidiendo justicia

Familiares y vecinos de Diego Sixto, un poblador asesinado, marcharon en Villa Llanquín para exigir que el imputado por el crimen ocurrido en un paraje cerca de Bariloche cumpla prisión preventiva.

La comunidad de Villa Llanquín se movilizó este domingo 25 de mayo en reclamo de justicia por Diego Sixto, el poblador de 44 años que fue asesinado de un escopetazo en el rostro. El crimen sucedió el pasado 5 de mayo, en un campo del paraje Pilpilcura cerca de Bariloche. Familiares y vecinos exigen que el imputado por el crimen, Carlos Sandoval, de 71 años, cumpla prisión preventiva mientras avanza la investigación judicial. «Me mandé una macana», había dicho antes de ser detenido previo a la formulación de cargos. Tras quedar imputado, resolvieron su libertad durante el proceso.

La manifestación se llevó a cabo en un clima de dolor y bronca. «Nos duele saber que el asesino de Diego camina libre por Bariloche como si nada», expresó uno de sus compadres. La mamá de Sixto también alzó la voz: “Pido justicia, que ese hombre vaya preso por lo que le hizo a mi hijo”.


El crimen de Diego Sixto: cómo ocurrió


El hecho ocurrió entre la noche del 4 de mayo y la madrugada del 5, en un campo ubicado a unos 13,6 kilómetros de Villa Llanquín, en el sector conocido como paraje Pilpilcura. Según la acusación de la fiscalía, Sixto y Sandoval habían compartido una jornada de trabajo y luego una cena con bebidas alcohólicas, cuando surgió una discusión sobre quién era mejor amansador de yeguas.

La manifestación fue en pleno festejo patrio por el 25 de mayo. Foto Gentileza Limay TV.

El intercambio subió de tono y derivó en una agresión física: Sixto, montado a caballo, habría golpeado con un rebenque a Sandoval. Este, enfurecido, ingresó a su casa, tomó una escopeta calibre 16 y salió tras Sixto. Lo alcanzó en la tranquera del campo y, según el fiscal, le disparó directamente al rostro. El cartucho dejó 65 perdigones esparcidos por el cráneo y el cuerpo de la víctima. Sixto murió poco después por una hemorragia fatal.


La investigación judicial: cargos sin prisión preventiva


Carlos Sandoval fue imputado por el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego. La audiencia se llevó a cabo en los Tribunales de Bariloche. El fiscal Gerardo Miranda, junto a la fiscal adjunta Mariana Lascano, pidió que se le dictara prisión preventiva por cuatro meses, alegando que el acusado podría entorpecer la investigación, especialmente influenciar al principal testigo, quien presenció el crimen.

Sin embargo, el juez de garantías Ricardo Calcagno desestimó el pedido y aceptó la propuesta de la defensa: Sandoval continuará el proceso en libertad, con la obligación de fijar domicilio en la casa de un familiar en el barrio Vivero de Bariloche, sin poder salir del ejido municipal ni contactar a testigos.


El testimonio y la entrega voluntaria


El crimen fue presenciado por otro poblador que también había compartido la jornada con Sixto y Sandoval. Este testigo fue quien acompañó al acusado hasta el destacamento policial para que se entregara. Según su declaración, Sandoval le dijo: «Me mandé una macana».

La defensa de Sandoval argumentó que su cliente no representa un riesgo para la investigación, que se entregó por voluntad propia y que los elementos fundamentales de prueba ya fueron recolectados. El testigo principal ya declaró ante la fiscalía y solo restan pericias técnicas, por lo cual habían considerado innecesaria la prisión preventiva.


Indignación en la comunidad de Villa Llanquín


«Cárcel para el imputado». Eso rezaban las pancartas en la marcha. Es que, la resolución judicial generó profundo malestar entre los vecinos de Villa Llanquín, que este domingo patrio marcharon en silencio portando carteles y fotos de Diego Sixto.

El reclamo fue unánime: que el acusado espere el juicio en prisión. «Mientras nosotros estamos con el corazón destrozado, sabemos que esta persona anda libre por Bariloche, caminando y haciendo compras por la ciudad. Es indignante que no tenga un grado de remordimiento«, expresó Julio, concuñado de la víctima.

Foto Gentileza Limay TV.

«En Villa Llanquín estamos pasando un momento de mucha congoja. No podemos creer que la justicia funcione así», concluyó con firmeza.


Los próximos pasos en la causa


El juez fijó un plazo de cuatro meses, con fecha límite el 5 de septiembre, para que las partes lleven adelante la investigación. Durante ese período, la fiscalía podrá continuar reuniendo pruebas, tomar nuevas declaraciones y realizar las pericias restantes. Finalizado ese plazo, se decidirá si el caso pasa a juicio oral y público.

Mientras tanto, Sandoval no podrá salir del ejido de Bariloche, ni tener contacto con testigos por ningún medio, y deberá cumplir con el control de la tobillera electrónica.